El paro ha vuelto a subir en Austria (mecachis en la mar) pero en Viena Directo te damos pautas para que puedas encontrar pronto un empleo, si lo estás buscando.
1 de Abril.- Como viene siendo norma (desgraciadamente) y como informamos en Viena Directo (de esto, sin mucho gusto, esa es la verdad), durante el mes de febrero el paro ha vuelto a subir en Austria.
Ays.
Peeeero, como en este blog a mí lo que menos me gusta es el tema del regodeo en las malas noticias, hoy vamos a enfocar el problema del paro de otra manera, un poquitín más positiva (y, por supuesto, no me refiero a que cuando estás en el paro tienes muchísimo más tiempo para practicar sexo o para entregarte a la pintura de soldaditos de plomo) sino que hoy vamos a tratar de hacer un recuento de todas las cosas que molan en el mercado de trabajo austriaco a la hora de encontrar un empleo.
A saber:
1.- Hablar alemán: en muchas profesiones no es imprescindible (pocas, solo las técnicas) pero qué duda cabe que saber alemán es el factor que, en muchas ocasiones, decide no ya si el candidato obtiene el trabajo, sino si puede optar a él siquiera. Obviamente, también es muy chulo hablar, aparte, otros idiomas. Cuanto más escasos y en constelaciones menos frecuentes, muchísimo mejor. En Austria escasea, por ejemplo, la gente que hable bien francés o que lo hable junto con otro idioma latino. También son muy demandados los idiomas del este (lógicamente, porque Austria tiene un gran contacto comercial con estos países).
2.- Desempeñar una profesión o tener conocimientos y/o habilidades que sean infrecuentes en el mercado de trabajo. Es lo que se llama la ventaja competitiva. Antes de ponerte a mandar currículums, antes siquiera de pensar en buscar trabajo en Austria, piensa ¿Qué tengo yo que no tenga nadie más o que tenga muy poca gente? Solo es cuestión de encontrarlo (y de saberlo escribir bien en el Currrículum, claro).
3.- Quien mucho abarca, poco aprieta. Así pues, intenta focalizar tu búsqueda en aquellos sectores en los que puedas encajar por tus conocimientos (ver punto 2) y/o experiencia anterior. A los empleadores, en general, les pone los pelos de gallina aquello de “no, yo he venido aquí a trabajar de lo que sea”. Dejando aparte, claro está que, en Austria, como en todas partes, hay gente a patadas tratando de encontrar trabajo “en lo que sea” y, además, hay gente a patadas que está trabajando “en lo que sea”. En muchos casos porque son gente que vienen de otras naciones en donde sus abuelos ya hablaban alemán antes de que ellos nacieran (ver punto 1).
4.- Cultiva tus cualidades interiores. Esto, parece una tontería, pero no lo es. La honradez, el espíritu de equipo, el tomar las cosas con espíritu deportivo, la resistencia al estrés, y otras tantas cosas, van de dentro hacia afuera. O sea, que son cosas que no se pueden escribir en un Currículum pero que, en una entrevista de trabajo, se notan. Y, lo que es mejor: marcan la diferencia.
5.- Trata de buscar trabajo en empresas que tengan una cultura interna que se parezca a tu forma de ser. Esto es: si tú eres una de esas personas que yo llamo “asistenciales”, que se preocupan de sus conocidos mogollón y son sensibles y altruistas y tal y cual, no busques trabajo de broker de bolsa. No solo porque es muy probable que no supieras hacerlo bien sino porque, con muchísima seguridad, no serías feliz. Y la clave de todo esto, aunque parezca que no, no está en los laureles que caen a final de mes, sino en estar contento con lo que haces. Tanto la gente que te paga, como tú mismo, al final, sale ganando.
Y la 5+1 para terminar: si no encuentras el trabajo de tu vida a la primera, no desesperes. Está ahí, esperándote. Solo es cuestión de tiempo. Porque suerte, te sobra. No tengo la más mínima duda.
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