Isabel busca a alguien con quien hablar

ConversaciónUna lectora de Viena Directo plantea una cuestión que tiene una respuesta agridulce, la verdad.

14 de Agosto.- Antiguamente, en la era predigital (o sea, ayer por la tarde, aunque parezca que han pasado ya cincuenta años) por la letra de una persona se podían saber muchas cosas. Si era hombre o mujer, tranquila o nerviosa, segura o insegura, la clase social a la que pertenecía, su nivel de instrucción, su edad aproximada. Los que conservábamos el hábito de escribir a mano podíamos leer no solo las palabras, sino hacernos una idea de todas estas cosas que, cuando cogemos un bolígrafo, decimos de nosotros sin darnos cuenta.

Hoy por la mañana, mientras iba a trabajar, he recibido un correo electrónico muy interesante, pero pensaba yo que, si hubiera sido carta o nota pues quizá podría haber dicho algo más de la persona que lo ha escrito. Lo firma pongamos que Isabel (me ha pedido que no diga su nombre de verdad y, naturalmente, respeto su voluntad) y, por parte de lo que dice, se puede inferir que es de Madrid. El correo, cortito, escrito con aseo, dice así:

Hola Paco!

Me animo a escribirte para comentarte una duda existencial que tengo: yo trabajo y vivo por así decirlo en alemán, tengo muchos contactos, grupos a los que acudo para ejercitar diferentes aficiones, ya sean juegos de mesa, practicar idiomas, cine o simplemente beber en Heurigens (sic), que se considera aqui prácticamente deporte nacional 😀

El caso es que yo soy de Madrid, y allí me movia en circulos en los que hablabamos de psicologia, de filosofia, de trabajo persona en general, ya sea reiki, budismo, meditación, risoterápia, o sinergética. Yo no he llegado a profundizar en una actividad concreta, pero algo me dice que en la ciudad de Freud debe de haber grupos en los que se hable de filosofía, de psicologia o de trabajo personal, y que no consistan en hacerse vegano o practicar el sexo en grupo, cosas que respeto completamente pero no comparto ¿Cómo se encuentra de eso? Hay lugares/mítines/asociaciones en los que pueda sentirme a gusto y conectar? El idioma no es un problema.

Un saludo enorme, muchas gracias por seguir ahi tan perseverante como siempre y a desfrutar del cálido verano.

El correo al que acaban de echarle un vistazo mis lectores me ha dado mucho que pensar. No porque yo sea especialmente fan de la sinergética (aunque sí de la risoterapia, que practico siempre que puedo) sino porque ese sentimiento de Isabel delata la presencia de una persona inquieta y sensible, lo cual mola por un lado (serlo y tenerlas al lado de uno) pero por otro lado no mola nada, porque la inquietud intelectual y la sensibilidad, degraciadamente, escasean.

Cuando se acabó la noche tenebrosa y boba del franquismo, alguien fue a hacerle una entrevista a Salvador de Madariaga el cual vivía, en aquellos momentos, en París. El periodista le preguntó que si se volvería a España cuando la democracia se asentase y la amarga respuesta de Salvador de Madariaga fue:

-¿Para hablar con quién?

Querida Isabel: escasea mucho la gente con conversación. Es un drama cotidiano al que nos enfrentamos aquellos a los que nos gusta conversar con un poco de fundamento y no repetir como tontos lo que dice el Joite o lo que han hecho en el último campamento o isla con olor a pies sudados.

Encontrar personas con las que uno tenga de qué hablar es difícil y si además de hablar quiere uno reirse, entonces es la pera limonera. En Madrid, en Viena y en Hong-Kong, por eso, cuando uno encuentra alguien así de especial hay que cuidarle. Si no existiera ya, te diría que te abrieses Viena Directo, porque yo he conocido a muchas de las personas con las que con más placer converso a través de este blog. Pero ya te digo, mi solución ya está pillada.

No quisiera terminar sin darte un rayo de esperanza (me temo que mi respuesta ha sido algo pesimista). Lo chulo de la gente como esta que nos ocupa es que son como las picotas. O sea, que tienden a juntarse y a funcionar en grupos. Así que, si encuentras a una, es probable que vengan más detrás. Es una ley universal. También funciona en Viena.

NOTA: Por cierto, si hay algún lector de VD que tenga intereses comunes con Isabel, que se manifieste y yo le mandaré a ella el correo para que se ponga en contacto con él.

 


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Comentarios

2 respuestas a «Isabel busca a alguien con quien hablar»

  1. Avatar de Lena
    Lena

    Existe una página web para organizar quedadas, se llama meetup.com. Tal vez allí encuentre Isabel etwas passendes.

    Saludos des del Tirol.

  2. Avatar de Floriane M.
    Floriane M.

    Hola!
    Yo no sé mucho de filosofia ni psicologia, pero vivo muy cerca de la Kaiserstraße. Paso a menudo delante de lo que me imagino es un circulo de filosofia, se llama “Verrückt nach Sokrates”. Aqui esta la pagina web: http://www.puls4.com/Verrueckt-nach-Sokrates-Philosophische-Praxis/Wien/community_/location/veranstaltungsort/22958
    Igual aqui Isabel se encuentra con gente interesante y abierta?
    Un abrazo.

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