La “refinitiva”

FuegoHoy se termina lo bueno. Defintivamente. Después de casi una semana alejado de este espacio, empieza, lentamente, la descompresión.

6 de Septiembre.- Ya se acabó lo bueno. Hoy, terminan, definitivamente, las vacaciones de verano. Esta última semana, he estado en España, alejado de las redes sociales, tratando de terminar un libro que estoy escribiendo y que ya se está acercando a la recta final, visitando a la familia, de viaje por Galicia. Han sido días, sobre todo, de muchas risas. Pero ahora, lo dicho: se termina la fantasía y llega la dura realidad.

En la civilización judeo-cristiana, en la que hemos crecido, se disfruta siempre con temor, porque nos han enseñado que, cuanto más hinchado está el globo de nuestro placer, cuanto más redondo y más alto sube, más fuerte luego es el trompazo. Después de las vacas gordas del boom inmobiliario, vino el llanto y el crujir de dientes de los “brotes verdes”. Las cabras famélicas se comieron los brotes y ahí estamos todavía, después de ocho años, discutiendo sobre quién se comió el último huevo frito y a quién le tocará el próximo (cuando haya).

Cuando yo trabajaba en la tele y todavía estábamos convencidos de que España jugaba en la “champions”, como una respuesta natural a aquellos tiempos, surgió la información del corazón como lucrativo producto industrial. Empezó en Tómbola (¡Aquel primer Tómbola del que Chabeli se fue porque le hacían preguntas que no le gustaban! Qué candidez) y de ahí para arriba. Durante años, Antena 3 y Tele 5 estuvieron en una champions: en la de las empresas más rentables de Europa, y fue por el llamado “corazoneo”. Todo el que está familiarizado con el marketing sabe que los productos tienen un ciclo de vida, que no se mantienen nunca en lo que en la terminología se llama “producto vaca” (o sea, ese producto que se ordeña felizmente y da beneficios con poco esfuerzo).  La información del corazón, que no puede reinventarse indefinidamente, ya ha dado todo lo que tenía que dar, así que ahora, el nuevo corazón es la política. España bulle, en este verano de colosos en llamas y de calores, de tertulias en las que tertulianos a sueldo propagan la voz de su amo. Da la sensación de que Saturno hubiera acabado ya de zamparse a sus hijos y hubiera empezado a morderse, golosamente, una mano.

Los políticos españoles ya no hablan en el parlamento (“en sede parlamentaria” que dicen los reporteros que ya no trabajan para Korpa, pero que aprendieron las maneras) hablan en esa especie de photocall en el que se ha transformado la puerta del Congresoy, naturalmente, tienen “spin doctors” que les inventan los totales que luego salen en El Intermedio o en El Cascabel. Y yo estoy seguro de que gran parte de la situación actual de parálisis es una creación interesada del sector de la industria de la televisión. Un amigo mío dice que vamos hacia el mundo de los sucedáneos, y que los pobres se diferenciarán de los ricos en que los pobres pensarán que están consumiendo liebre cuando están zampándose un pobre gato. Nos venden que es información y es…Bueno, corazoneo.

En Austria, la profecía judeo-cristiana de que lo que empieza en risas termina en lágrimas nos promete un otoño en el que purgaremos nuestros pecados. La campaña electoral para las segundas elecciones presidenciales ha sido oficialmente abierta. Por suerte, en Austria no tenemos ni la Sexta, ni 13TV ni Telecinco ni Antena 3, pero el voto tróspido viene avanzando, prietas las filas, rectas, marciales, y la legión del sucedáneo ya ha dado en Alemania el primer puñetazo encima de la mesa. Tendremos que prepararnos para lo que viene: risas de pirómano al que no se le ocurre otra manera de protestar sobre el estado del bosque que quemarlo con nosotros dentro.

En la Biblia dice que vemos como por un espejo. Austria y España, los dos espejos paralelos entre los que se desarrolla mi vida. Uno explica al otro. Para bien, y para mal. Mañana, volverá, a este espacio, la realidad. Las risas, los olores, los sabores, el vino de las noches de verano, nos consolarán en el recuerdo.


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Comentarios

2 respuestas a «La “refinitiva”»

  1. Avatar de Bad Vöslauer
    Bad Vöslauer

    En Austria está a-tv, servustv, redbulltv y otros sucedáneos de la RTL, aunque promocionan todos esos programas en los que bucea la filial patria de Berlusconi,curiosamente poseen el 20.5% de cada uno de los canales de su competidor (A3Media);al menos Armin Wolf y la ÖRF parecen más serios que Urdaci al leer las siglas sindicales.
    En lo de las elecciones los íberos parece que sacan ventaja de una ronda a los del otro lado de los Alpes.

  2. Avatar de Dubuke
    Dubuke

    Algunos confunden a los que quieren un cortafuegos con los que van tirando cerillas por el bosque.

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