La Austrian Airlines hace un aterrizaje de emergencia

Últimas cifras – Europa pobre, Europa rica, espárragos y refugiados – La Lufthansa se queja (!Aua! !Aua!) – Estrategia común europea – Rapsodia húngara – buenos deseos (glubs)

7 de Abril.- Muy buenas tardes y bienvenidos todos a una nueva edición -la segunda de hoy- de Viena Directo, con las noticias más importantes relacionadas con el coronavirus en español.

Las cifras, proporcinadas como siempre por el Gobierno austriaco a las tres de la tarde, nos vuelven a dar otra alegría.

A esa hora, había en Austria 12.519 positivos, resultado de haber realizado 115.235 tests. El número de fallecimientos era de 243 y el número de personas que se habían curado con éxito del coronavirus era de 4046.

-Durante estos días atrás hemos hablado en repetidas ocasiones de los esfuerzos que han hecho diferentes países europeos, particularmente Alemania, pero también Austria, al objeto de traer a toda prisa trabajadores de la Europa „pobre“ (Rumanía, Bulgaria) al objeto de que recogieran las cosechas de los campos. Especialmente, los espárragos. Porque no había, al parecer, nacionales que quisieran hacer esto por los sueldos que se ofrecían.

La comparación de esta situación con las escalofriantes imágenes que vienen de la frontera exterior de la Unión, con miles de personas, entre las que hay un alto porcentaje de mujeres y niños, viviendo en condiciones infrahumanas, con hambre, frío y enfermedades (entre ellas, el coronavirus, que se extiende entre estos pobres como el fuego por un reguero de pólvora) han hecho decir a algunos de nuestros conciudadanos más concienciados (con razón) que nos preocupa más la dignidad de un espárrago que de un niño sirio. Hasta el momento, no se han registrado casos de dirigentes políticos ni de ciudadanos particulares a los que se les haya caído la cara de vergüenza debido a esto (habiendo tantas razones para ello).

Sin embargo, la cosa puede estar cambiando. Alemania ha anunciado que el Gobierno autónomo de Hannover ha anunciado su intención de acoger a cincuenta menores de edad procedentes de las islas griegas, y que podrán pasar las dos semanas de cuarentena en Baja Sajonia. Después, serán repartidos por diferentes estados federales de Alemania (no vaya a ser que, siendo cincuenta, les dé por formar un ejército y cometer fechorías).

Alemania quiere también participar en una acción conjunta con Luxemburgo. El ducado, que se encuentra, sin lugar a dudas, entre los países más pobres del mundo, va a hacer el supremo sacrificio de recoger a 12 niños de las islas griegas. Se ha organizado un vuelo charter para llevarlo a cabo.

Grupo escultórico de Sans Souci en Potsdam, Berlin

Mientras tanto, en Austria, crecen las voces para que, con la crisis del coronavirus, se dé asistencia sanitaria a los „sin papeles“.

En un documento, firmado por un buen número de profesionales de la medicina, se pide al Estado austriaco que, en atención a las circunstancias excepcionales que estamos atravesando, se dé asistencia sanitaria a los „sin papeles“.

Según los datos que manejan estos profesionales de la sanidad, en Austria viven alrededor de 100.000 personas que están en el país de manera ilegal, sin un permiso de residencia válido. Estas personas, como es lógico, no están aseguradas y por lo mismo no les queda otro remedio que evitar a los médicos y a la policía de extranjería.

Lamentablemente, siguen poniéndose enfermos y representan una población cuyo estado de salud, si se descontrola, puede resultar en un riesgo para la población austriaca en general. Por eso, estos profesionales de la sanidad, impulsados por un estudiante de medicina llamado Tobias Schweiger, han firmado un documento en el que se pide al Gobierno austriaco que, durante la crisis del coronavirus, se llegue a una manera de que estas personas, de enfermar, puedan ser tratados sin tener miedo.

Una pareja en un aeropuerto
Exactamente así está el tráfico aéreo (Archivo VD)

-Siguiendo con las consecuencias económicas de la crisis del coronavirus, uno de los sectores que están sufriéndola con más fuerza son las compañías aéreas.

Hoy se ha sabido que la Lufthansa, que agrupa a varias compañías aéreas, ha emprendido una dura labor de reestructuración para hacer frente a las enormes pérdidas que está causando la obligación de tener a la flota aérea en tierra y las que se prevén por el incierto estado de las comunicaciones internacionales de aquí a, por lo menos, finales de este año.

De momento, la compañía alemana ha anunciado que Germanwings va a desaparecer, víctima de la reestructuración. En todas las compañías que pertenecen a la Lufthansa la crisis del coronavirus va a traer una reducción de puestos de trabajo y de gastos de administración.

También la Austrian Airlines, participada en parte por la Lufthansa, va a sufrir un encogimiento. En estos momentos, 7000 trabajadores de la Austrian Airlines se encuentran en Kurzarbeit (en español, un ERTE) y se prevé que, debido a la bajada de viajeros durante este año y los dos que vienen, se va a reducir la flota de aviones en servicio para reducir gastos.

Se sabe también que la Austrian Airlines ha pedido socorro estatal y, según fuentes del canal Bloomberg, ha pedido al Estado austriaco 500 millones de Euros para una operación urgente de salvamento.

Naturalmente, la Austrian Airlines no ha querido confirmar esta cantidad, pero según los expertos es lo mínimo que necesitará para poder sortear estos convulsos tiempos de restricciones al tráfico aéreo.

Lo que sí que parece claro (por lo menos de momento) es que la Lufthansa no está pensando en deshacerse de la Austrian Airlines, y que la quiere conservar dentro del grupo.

-Y por fin, lo que parece una buena noticia desde Bruselas. En estos momentos, los Ministros de Economía de la Unión están reunidos para intentar coordinar una respuesta conjunta (económica) a la crisis del coronavirus.

Las posturas, como saben los lectores de Viena Directo, están muy enfrentadas. Los países más golpeados por el coronavirus (que son, casualidades de la vida, los que fueron más golpeados por la crisis producida por la Gran Recesión de 2008) piden que el titánico esfuerzo de reconstruir las economías del sur de Europa sea asumido solidariamente y que todos los países arrimen el hombro, con la emisión de los famosos coronabonos, por ejemplo.

Sin embargo, los países del norte no están para nada por la labor y, como es el caso de Austria, le dicen a los países del sur que hay mecanismos en la Unión Europea (por ejemplo el famoso fondo de estabilidad creado para sostener a Grecia) que ya existen y que podrían usarse para salvar a los países de la Unión. Esta ayuda se concretaría en forma de créditos baratos y de pago muy diferido en el tiempo (décadas, como en el caso griego).

El obstáculo a remover en estos momentos es que los países del norte quieren un método eficaz para poder controlar que los países del sur no se gastan las perras en sangría (o en Lambrusco) y que, en realidad, utilizan el dinero para la reconstrucción de sus economías maltrechas por el virus malandrín.

En cualquier caso, está previsto que la jefa de la Comisión Europea, Ursula Van der Leyen, presente mañana una estrategia común europea para ir suavizando poco a poco las restricciones que la crisis del coronavirus ha provoado. El objetivo sería una respuesta coordinada por parte de todos los países de la Unión.

(Por lo que parece, el portavoz de la señora Van der Leyen, un caballero llamado Erich Mamer, ha anunciado que su jefa va a hacer este anuncio sin desorinarse allí mismo).

Algunos países ya han empezado con la estrategia de apertura, como por ejemplo Austria y Dinamarca, y los resultados obtenidos por estos países van a ser observados de manera atenta por la Comisión Europea. De lo que se trata ahora es de la elaboración de un concepto común.

-También relacionado con nuestra Casa Común es la rapsodia húngara que se está marcando, como ya saben mis lectores, el Gobierno de Budapest al mando de Viktor Orbán.

El partido que sustenta en el Gobierno a Orbán, Fidesz pertenece, como quizá sepan mis lectores, a la fracción del Partido Popular Europeo en el Parlamento de Bruselas.

No es la primera vez que las salidas de tono de Orbán ponen en peligro esta pertenencia. De hecho, repetidas veces, la fracción ultraderechista del parlamento, a la que pertenece por ejemplo el FPÖ pero también el Front Nationale, le ha dicho a Orbán y a su partido que tiene unos ojos muy bonitos y, tras preguntarle si estudia o si trabaja y si dispone de sitio, le ha propuesto echar un coito (todo políticamente hablando, por supuesto).

Hasta el momento, en el último ídem siempre se ha salvado la situación mediante una estrategia que Chamberlain hubiera llamado „de apaciguamiento“. Esto es: Orbán siempre prometía volver a portarse bien y no hacer caso de la tentación ultraderechista y los conservadores europeos le perdonaban. Orbán era bueno durante quince días aproximadamente y luego, volvía el juego a empezar.

La postura del Gobierno austriaco ante el „autoapagado“ del Parlamento de Budapest es sumamente ambígua. El canciller Kurz, preguntado al respecto, alegó primero „no tener tiempo“ (literal) para ocuparse de estas cosas y después ha dicho que observará la evolución de los acontecimientos en el país vecino „atentamente“ (que es una cosa que siempre se dice cuando no se quiere decir nada.

Entretanto, los diferentes partidos populares europeos están en estos momentos discutiendo qué hacen porque no tienen ninguna opinión común al respecto de qué hacer con Orbán y con Fidesz. De momento, se escudan en que les hace falta un dictamen jurídico al respecto.

En un documento firmado por trece de las delegaciones „populares“ presentes en el Parlamento, se ha pedido la expulsión de Fidesz (Luxemburgo, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Bélgica, Portugal, Polonia, Malta, Lituania, República Checa, Eslovaquia, Estonia y los Países Bajos).

-Y hoy para terminar, una noticia que demuestra que los políticos tienen también su parte humana, que no es todo esa brega en comisiones, parlamentos y moquetas. Que incluso los que parece que en vez de corazón tienen un pedrusco, en realidad son gente de carne y hueso como usted y como yo.

El mandatario que más mandata en Rusia, nuestro Vladimir Putin, al enterarse de que Boris Johnson está pachuchete el hombre, en su lucha por inmunizarse contra el coronavirus, le ha deseado al primer ministro británico „energía, optimismo y sentido del humor“ (glubs) en su lucha contra la enfermedad. A mí, me escribe Putin un tarjetón con esas palabras y empiezo a llamar a la funeraria.

En fin, y con estas noticias, me despido hasta mañana a la una que será un día muy importante para los estudiantes de Esta Pequeña República porque el ministro más alto del Gabinete (el de Educación) va a anunciar (!Por fin!) cómo se van a ir abriendo las escuelas.

Hasta entonces, a seguir divinamente y a portarse con sentido común. Un cordial saludo y les veo mañana.


Publicado

en

,

por

Etiquetas:

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.