El dilema de la vacuna de AstraZeneca

El dilema con la vacuna de AstraZeneca – Rudolf Anschober ha vuelto y lo ha hecho para acometer un acto heroico – 48.500 personas vacunadas ¿Un dique de contención eficaz?

15 de Marzo.- Ayer, en La Tarde en Directo, me preguntaron los lectores a propósito de la vacuna de AstraZeneca.

Hoy, en un efecto dominó, varios países europeos, entre los que ha estado España, han decidido suspender el uso de este medicamento de manera cautelar.

¿Está justificada esta suspensión? Recapitulemos.

Estos son los hechos.

A lo largo y ancho de la Unión Europea se han producido varios casos de trombos en las proximidades de la vacunación con AstraZeneca. Hay que recalcar „en las proximidades“. De momento, los científicos de la Agencia Europea del Medicamento no han podido encontrar una relación entre la vacuna y la formación de trombos (mañana está previsto que den a conocer un informe sobre el tema).

En el Reino Unido, por ejemplo, se ha vacunado a diez millones de personas con la vacuna de Astra y a otros diez con la de PfizerBiontech. Se han detectado trece casos de trombosis en las proximidades de la vacunación con Astra y quince en las proximidades de PfizerBiontech. Las autoridades sanitarias austriacas tampoco han podido encontrar ninguna relación de causa-efecto entre las vacunaciones y la formación de trombos. Es más: la proporción de personas que padecen trombosis en la población vacunada es exactamente igual que entre la población no vacunada.

En principio, no parece que haya razones para suspender la vacunación. Sin embargo, esta historia ya ha hecho un daño gigantesco y es que aunque se demostrase, como así parece, que no hay absolutamente ninguna relación entre las trombosis y la vacunación, esta historia ha calado tanto en la población que ha generado una enorme desconfianza.

En estos momentos, las autoridades sanitarias austriacas están debatiendo qué hacer. La decisión no es nada, pero que nada fácil, porque la vacuna de AstraZeneca es una pieza fundamental de la estrategia de vacunación en Austria. Y lo que tampoco hay que olvidar es que la vacuna de AstraZeneca se ha demostrado eficaz en la prevención de cursos severos de la enfermedad. Muy eficaz.

Dejar de vacunar ahora, o suspender la vacunación implica con que habrá gente que va a morir y que, si se demuestra que la vacuna no es peligrosa podría haber sobrevivido.

De momento, el Ministro de Sanidad, Rudolf Anschober, ya de vuelta después de su enfermedad, ha pedido esta tarde una línea de actuación clara a nivel europeo.

EL MINISTRO DE SANIDAD ANSCHOBER AL RESCATE

Efectivamente: el Ministro de Sanidad está de vuelta de su baja por enfermedad y sin duda hoy se podrá ir a la cama sabiendo que ha hecho algo heróico: salvar la coalición que Gobierna este país y darle a Austria una estabilidad política que, en estos momentos, se necesita bastante.

Como recordarán los lectores de Viena Directo, el Bundescanciller Kurz se sintió desautorizado cuando dos funcionarios del Ministerio de Sanidad, entre ellos el delegado ante la Unión Europea para los asuntos de vacunación, Sr. Auer, le desmintieron en sus indignadas declaraciones a propósito de los procedimientos de la Unión Europea para repartir las vacunas.

La cosa había adquirido algunos rasgos de bazar, según Kurz.

Los funcionarios dijeron que no, que el reparto había seguido procedimientos transparentes.

Cundió la indignación en el Partido Popular austriaco y se pidió la cabeza de los dos funcionarios en cuestión. Hoy, Anschober se la ha dado.

Según Anschober, Clemens Auer había actuado mal al no informar de que existía la posibilidad de pedir dosis suplementarias de vacunas.

Ni siquiera yo estaba informado“ ha dicho, y ha añadido despues que Clemens Auer renunció de manera unilateral a pedir esas vacunas suplementarias a pesar de que Austria había apartado para este fin los recursos financieros necesarios.

¿Es creíble que Anschober no estuviera informado de un tema tan importante? Es muy poco creíble, tan poco creíble como que no lo estuviera Kurz. Y sin embargo, parece que la República austriaca podría haber perdido hasta 700.000 dosis de vacunas (que hubieran servido para inmunizar a 350.000 personas).

Toda estas fintas políticas tienen mucho que ver con el desgaste que está sufriendo Kurz en las encuestas y con el descontento de la población la cual cada vez es más consciente de que la única manera de salir de esta situación es vacunarse (si hubiera con qué).

El canciller necesita tiempo y, al mismo tiempo, se encuentra en un proceso de acercamiento a los socialistas. Por los mentideros de Viena corre la buena sintonía que reina entre Sebastian Kurz y Pamela Rendi-Wagner. De pronto, la indudable competencia científica de la líder de los socialdemócratas la hace muy atractiva para un Gobierno conjunto.

Sin embargo, los socialistas ya lo han dejado claro: no habrá una coalición si no hay antes elecciones.

Así las cosas, al pobre Anschober le ha tocado bailar con la más fea. Puesto en una situación difícil, arrinconado en una posición muy difícil de defender, ha preferido sacrificar a uno de sus aliados a salvar un determinado orgullo y dar a los conservadores una cabeza de puente para unos ataques que hubieran terminado en una ruptura de la coalición.

Hoy, cuando le han preguntado por la enfermedad que le ha tenido alejado durante dos días ha dicho que estaba „bastante agotado“.

No es para menos.

48500 PERSONAS VACUNADAS

Entre tanto, 42.500 residentes en la localidad tirolesa de Schwaz han sido vacunados con el suero de PfizerBiontech, según informa la agencia APA. La acción de vacunación todavía no ha terminado y se espera que, al final, sean unas 48500 personas las que se inmunicen, de un total de 64000 que hubieran podido acogerse a esta acción. Esto hace más o menos un 76% de la población de la comarca de Schwaz.

Como recordarán los lectores de Viena Directo, la alta incidencia en la comarca de Schwaz de la variante sudafricana del coronavirus hizo aconsejable levantar un „muro de contención“ en forma de muchas personas vacunadas y, por lo tanto, inmunizadas.

A estos efectos, Austria recibió un contingente extra de cienmil dosis de la Unión Europea. Asimismo, se estudiará cómo es de eficaz la vacuna de PfizerBiontech en relación con la variante sudafricana del coronavirus.

Hasta ahora, los intentos del alcalde de Wiener Neustadt, en las cercanías de Viena, de acceder a otro contingente semejante han sido en vano.

Wiener Neustadt sigue confinada. Solo se puede salir presentando un test negativo.


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