
Primero fueron rumores, pero ayer se confirmó. Un alto diplomático austriaco vuelve a casa, aunque no por su voluntad.
31 de Julio.- Hace ya muchos años (por eso lo cuento) un amigo mío, por su mala cabeza, le alquiló un apartamento a un diplomático de un país latinoamericano que no diré, para que no se pueda saber de quién hablo.
El diplomático, como suele pasar mucho en ese gremio, era homosexual. También era bastante sinvergüenza. Sin que una cosa tenga que ver con la otra, naturalmente. Yo entonces tenía un grupo de amigos hispanohablantes con los que me reunía semanalmente a tomarme unas cerves y, antes de saber de qué pie cojeaba este tipo en lo tocante a la sinvergonzonería, me pareció natural invitarle a que se nos uniera, porque uno es de corazón generoso.
La primera cita, y creo que no hubo más, fue en el bonito restorán que está en la casa en la que nació Falco. Cuando fuimos a pagar, el diplomático nos pidió por favor si le podíamos dar los tiques, porque a él, siendo del cuerpo (diplomático), le devolvían el IVA. Tacita a tacita, nos contó, se sacaba por este procedimiento un pico todos los meses.
No empleaba ese dinero en pagar la renta del apartamento, sin embargo. Cuando empezó a deber dinero del alquiler, el casero se sintió en la lógica obligación de recordarle que tenía que pagar. El diplomático tomó entonces lo que debió de parecerle una decisión natural. Esto es: citar a mi amigo en el apartamento, recibirle en paños menores y, como decía Lola Flores en “El coraje de Vivir”, “ofrecerle su cuerpo para saldar la deuda contraída”.
(Sí, querido lector: sé que has leído esta última frase con la voz de la diva jerezana).
Mi amigo, por cierto, no estaba interesado en el miembro del miembro (del cuerpo diplomático, se entiende) y quería el dinero. Así que le hizo saber amablemente que tenía que pagarle o llamaría a la policía para que se lo llevasen a la comisaría, aunque fuera en tanga.
En fin, la vida.
Me he acordado de esta historia al saber la del representante permanente del Gobierno austriaco ante la Unión Europea, cargo frecuentemente acortado como “Embajador ante la UE”.
Con medias palabras al principio, con nombre completo después, los medios austriacos se han hecho eco del caso de este caballero, cuya identidad mantendremos en un piadoso anonimato (es padre de cuatro churumbeles), aunque es fácil saber su nombre si se rebusca un poquito por internet.
Una plataforma vinculada a un ex miembro del FPÖ, Fass Ohne Boden, se hizo eco hace algunas semanas del (presunto) pasatiempo favorito de este alto diplomático, el cual era escribir un blog bastante explícito de contenido sadomasoquista. Siguiendo una tradición que cuenta con precedentes tan ilustres como Felix Salten, el autor de Bambi, pero también de las picantes aventuras de Josefine Mutzembacher, el diplomático austriaco escribía sus fantasías sexuales poniéndolas en boca de una mujer. Los textos, presuntamente compilados en el tiempo que, se suponía, él utilizaba para velar por la posición de Austria en la Unión, contienen por lo visto numerosas apreciaciones humillantes para las mujeres. El blog ha desaparecido ya de internet.
Fass Ohne Boden solo se hacía eco de los rumores que corrían desde hacía semanas, y que amenazaban con poner en peligro la reputación de Esta Pequeña República.
Ante la situación insostenible, Beate Meinl-Reisinger, ministra de exteriores austriaca, “le aceptó” la dimisión al diplomático con veleidades literarias, y se lo ha traído a trabajar a la central de Viena, probablemente con la importante misión de mantener las letrinas de la sede de la diplomacia austriaca limpias y bienolientes como los chorros del oro.
El cesante era una de las personas más influyentes del servicio de exteriores austriaco, responsable de tareas al más alto nivel. Llevaba más de tres décadas trabajando con diferentes gabinetes, especialmente vinculado al Partido Popular austriaco, en el seno del cual tenía múltiples conexiones.
No se sabe si se tomarán medidas punitivas o disciplinarias ni se sabe tampoco si hay más personas implicadas en el asunto del blog sadomasoquista.
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