Si anda como un pato, hace cuack como un pato y huele como un pato, lo más probable es que sea un pato. Y es una idiotez que el pato se ofenda porque se lo digan.
21 de Enero.- Ya son varias las ocasiones en que lectores con diferentes grados de escozor me reprochan que utilice la expresión „extrema derecha“ para describir al FPÖ y sus partidarios. Por ejemplo, los antivacunas.
No es muy difícil averiguar que los que se molestan son simpatizantes del FPÖ a los que no les gusta verse a sí mismos como lo que son: ultraderechistas.
Basta una búsqueda que se hace en un voleo para entresacar las características de la ideología ultra y para darse cuenta de que tanto el FPÖ como sus simpatizantes se ajustan como anillo al dedo a la definición.
A continuación enumeraré las características más comunmente aceptadas del credo ultraderechista:
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Nacionalismo exacerbado. Se concibe la nación como una unidad étnica (la Volk) y se está en contra de la unidad cultural (Kickl: “Zuerst das Volk, dann der Kanzler” en donde Volk quiere decir los austriacos “puros”).
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Autoritarismo: defienden una sociedad estricta con castigos severos para los “desviados” (el FPÖ lleva como una de sus promesas electorales la bajada de la edad penal a los doce años).
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Populismo: dividen la sociedad en un pueblo “puro” y en una élite corrupta (el famoso lema de Haider reutilizado mil veces por el FPÖ “Sie sind gegen ihh -Kickl, Haider- weil er für euch ist” o sea “Ellos (las élites) están contra él (Kickl) porque está a vuestro favor”
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Nativismo: adoptan una postura xenófoba considerando cualquier idea extranjera como una amenaza contra el Estado-Nación (Kickl considera cualquier ideología foránea por defecto como “woke”)
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Conservadurismo moral: ayer mismo hablábamos de los roles de género conservadores promovidos por el FPÖ y su guerra constante contra las minorías, en especial el colectivo LGTBIQ+
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Antiinmigración, aquí creo que no hacen falta aclaraciones.
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Antisistema: hostiles a la democracia liberal y a aquellas instituciones como la Unión Europea, que la promulgan. En las últimas elecciones europeas, el FPÖ abogaba por acabar con la “EU Wahnsinn” o “locura de la Unión Europea”
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Visión conspirativa de la Historia y de los acontecimientos.
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Rechazo al pluralismo, especialmente en los medios de comunicación.
Me he extendido tanto porque creo que, para contar la noticia de hoy es necesario delimitar bien el terreno de juego.
En un acto típico del personaje, Harald Wilimsky, jefe de la delegación de la ultraderecha austriaca en Estrasburgo, hipócritamente indignado, ha difundido un correo electrónico de una periodista de la ORF destinada en Estrasburgo, sin ocultar ni la dirección ni el teléfono de la persona, porque esta mujer (mujer, además) había escrito en este correo que Harald Vilimsky y la fracción en la que se alinea el FPÖ en el Parlamento Europeo es “de extrema derecha” (far right).
Vilimsky, enseñando los colmillos, hacía protestas de inocencia (inútiles para aquellas personas que hayan leido hasta aquí).
¿De extrema derecha? ¿Yo? -decía y añadía que cuando alguien, una periodista (mujer, además) difundía estos infundios, se veía en la obligación inevitable de “defenderse”. Por eso había hecho pública la dirección de correo, el nombre y el teléfono de la pobre periodista.
El mensaje, por supuesto, estaba claro. Es un aviso para navegantes del FPÖ (y de una de las personas con más poder dentro del FPÖ) a los medios, sobre todo a los medios austriacos.
Como era esperable, Vilimsky ha recibido el apoyo de todos sus compañeros de birras (en esa fracción del Parlamento europeo, como es fácil suponer, está lo mejor de cada casa) y la condena de todo el resto de fracciones. Por abusón, por intentar acogotar a una pobre periodista y por pasarse por el escaño las leyes de protección de datos.
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