La ciudad de Viena va a contratar personal para reforzar los equipos que luchan contra la pandemia.
21 de Septiembre.- En esta vida, la falta de suerte de unos puede ser la fortuna de otros, y así el virus malandrín, con su carga de preocupantes presagios, también está trayendo nuevas profesiones (que esperemos que sean tan efímeras como los pabellones de las exposiciones universales).
Una de estas profesiones es la de rastreador de contactos de contagiados de coronavirus. Ante el aumento de los nuevos positivos en esta bonita capital que el Danubio riega con sus cantarinas linfas, el alcalde, Sr. Ludwig, ha anunciado su intención de contratar a 1000 nuevos trabajadores, porque la mies es mucha (cuando yo era chico, esta palabra, «mies », me intrigaba muchísimo, viene del latín « messis » y tiene una definición preciosa en el DRAE, « cereal de cuya semilla se hace el pan »).
En fin : Ludwig ha anunciado que se van a contratar 500 rastreadores, que se unirán a los cien que ya están trabajando en los servicios sanitarios vieneses (y que deben de estar hechos polvo, los pobres).
En la oferta de trabajo, que ya está publicada, aquí
se pide una buena ortografía alemana, conocimientos en idiomas extranjeros y experiencia en atención al cliente. El sueldo bruto que se anuncia es de 1831 euritos a jornada completa. El contrato tiene una duración limitada (y esperemos que no prorrogable, de diez meses).
La línea de atención 1450 también va a ser reforzada con 25 personas. Con lo cual se decuplicarán los recursos que había a principios de este 2020.
Los servicios sanitarios vieneses (MA 15) también van a ser reforzados con 150 trabajadores que se van a dedicar a la administración (certificados, justificantes, etc) y a la respuesta de preguntas de diversas organizaciones.
Se van a prorrogar también los contratos de los 380 trabajadores que Viena contrató cuando empezó la crisis. Hasta 2021.
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