¿De dónde saco mis cifras de infectados? – Vorarlberg, zona peligrosa – reglas para esquiar con seguridad – parece que sí va a haber mercadillos de navidad.
24 de Septiembre.- El otro día, un lector me hizo una pregunta. Le chocaba una aparente disparidad entre el dato que yo daba de las infecciones diarias y el dato que daba el Ministerio (aparentemente, mucho menor).
Como cantaba Antonio Machín, aquí va mi explicación.
En realidad, no hay discrepancia.
El Gobierno austriaco da todos los días una nota de prensa a eso de las diez de la mañana en donde se da el número de nuevos positivos en las últimas veinticuatro horas. Hoy, por ejemplo, han vuelto a ser muchos: 832.
Esto significa que ese dato que da el Ministerio contiene a los nuevos pachuchos de entre las diez de la mañana de ayer y las cero horas de hoy mas los que se han dado entre las cero horas y las diez de la mañana de hoy.
Luego, aquí (https://info.gesundheitsministerium.at/) se puede consultar una tabla que va por días cerrados. O sea, ayer, entre las cero horas y las 24, hubo 599 nuevos positivos.
Es decir, que son los mismos datos, pero cogidos en otro intervalo.
Dicho esto, entremos en materia.
VORARLBERG, EL LÄNDLE, ZONA PELIGROSA
Ayer, el Instituto más „Bacilón“ de la Unión Europea (ya lo saben mis lectores, el Instituto Robert Koch de Berlín) catalogó a Vorarlberg como zona de riesgo y recomendó a los teutones y a las teutonas que, si pueden evitarlo, no viajen a esta parte de Austria, famosa por sus Alpes y por su queso.
Esto coincide con el momento en que se acaba el verano y empieza la temporada de invierno. Todos sabemos que Austria, Esta Pequeña República, es famosa por ser un destino favorito de esquiadores. No solo austriacos, naturalmente, sino de otros lugares del mundo (para muestra, la lista de países de procedencia de los infectados en Ischgl, que parecía el marcador del festival de Eurovisión).
Se sabe que el putín de Putin viene de incógnito a disfrutar de la nieve polvo (dura o blanda) y quizá recuerden mis lectores que al príncipe Frisón, hijo de la reina Beatriz de Holanda, su afición a la nieve le costó la vida hace unos años (angelico).
Naturalmente, una parte importante del placer de esquiar es el „después de esquiar“ o „aprés-ski“, que suele consistir en ponerse ciego de alcohol y en berrear canciones que hacen de los himnos de los júligans delicadas muestras del arte de la escolanía infantil de los Niños Cantores de Viena.
Esta forma de divertirse es muy poco compatible con el coronavirus, por lo cual el Bundescanciller ha dicho que esta temporada toca „el placer de esquiar“ pero sin „aprés ski“.
(Pues vaya rollo, habrán dicho muchos, si la gracia del asunto es la cogorza)
Veamos en qué va a consistir esta cuadratura del círculo:
-Para empezar, aquellos que quieran ponerse las transaminasas bailando la macarena, van a poder hacerlo si bien con bastantes restricciones. El aprés-ski solo va a estar permitido sentado. Y va a haber cervezotas también, y chupitos y schnaps. Si bien solo hasta las diez de la noche.
En los alojamientos:
-Distancia de por lo menos un metro entre los huéspedes
–Mascarilla obligatoria para los trabajadores que tengan contacto con los clientes, así como para los clientes en los espacios comunes.
-Se va a mejorar la comunicación entre las empresas turísticas y los funcionarios de sanidad, al objeto de poder localizar y tratar rápidamente los casos sospechosos.
Para las escuelas de esquí:
-Máximo grupos de 10 personas
–No está permitida la mezcla de personas de diferentes grupos.
-Test gratis para los profesores de esquí, en el marco de la iniciativa „Sichere Gastfreundschaft“ (u Hospitalidad Segura)
Para los telesillas:
-Mascarilla en las góndolas
-A la hora de hacer la cola para subirse a ellos hay que guardar una distancia de un metro.
¿Y LOS MERCADILLOS DE NAVIDAD?
Ayer me preguntaba una lectora por los mercadillos de navidad. El Bundesgobierno también se ha pronunciado a este respecto:
-Los mercadillos de navidad tendrán que elaborar una guía de prevención e higiene que deberá contener los siguientes puntos:
*Análisis de riesgo
*Regulación del número de visitantes
*Medidas para conseguir espacios de consumo seguros.
*Comunicación (marcas en el suelo, pictogramas, etc).
También se va a testar a los trabajadores regularmente al objeto de mantener la seguridad (o por lo menos, al objeto de convencer a los posibles clientes de que se mantiene).
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