After Hours en Alcampo


28 de Diciembre.- Cuando llegué a Viena na de las cosas que más me sorprendían –y cabreaban– eran los horarios comerciales. Era, seguramente, porque los españoles estamos acostumbrados a ir de tiendas cuando no tenemos otra cosa mejor que hacer. Los sábados por la tarde, el momento más tonto de la semana, recorremos los pasillos del Carrefour, miramos los expositores y nos extasiamos ante lo absurdo de algunas ofertas sin decidirnos a comprar mucho, las cosas como son.
O nos metemos en un VIP´s o en una de esas cafeterías americanas que dicen que venden café pero que, en realidad, sirven un agua sucia que, por no poner, no pone ni nervioso.
En España el principio es: “mantengamos abierta la trampa lo máximo posible, que alguno caerá”. En Viena, todo está chapado a las 18:30 –máximo las siete-. Un día a la semana, los jueves, cierran los comercios a las ocho. Para rematar, los sábados, a las seis, cae la bomba de neutrones y, hasta el lunes, la ciudad está fibrilando, como decían en Urgencias. Ni un alma.
Cuando al principio, yo, presa del síndrome de abstinencia, me quejaba de esto, los aborígenes me miraban un sí es no es escandalizados y me decían:
-Es que las personas que trabajan en los comercios también tienen derecho a estar con sus familias.
Por no hablar de que, privados del atontolinamiento comercial, las gentes se ven forzadas a inventarse otros entretenimientos. Como salir al campo a ver árboles (yo, ya me he acostumbrado pero, de vez en cuando, el diablillo celtíbero que vive en mí sale, y me dice al oido que, donde esté una buena tienda, que se quite un bosque; y yo no tengo más remedio que darle la razón). Mi ideal sería pues dejar frita y humeante a la paloma de la VISA –si la tuviera o tuviese- pero entiendo que el sistema austriaco es mucho más educativo y más justo para todos. Y quizá, qui lo sá, la clave del éxito de este país en los informes PISA.
Han pasado los años, como en aquel bolero y a mí, ahora, los horarios españoles me parecen, no ya insensatos, sino abiertamente perversos.
El día de Nochebuena, sin ir más lejos, el Media Markt más cercano a mi casa cerró ¡A las ocho de la tarde!. Carrefour tiene abierto, según mis noticias, hasta las once, lo mismo que IKEA. Es que, pensándolo friamente, sólo se me ocurre una pregunta: ¿Quién es el desequilibrado que, a las diez y media de la noche de un martes, puede decir
-Arréglate Mari Cruz, que me acabo de dar cuenta que ahí, en el rincón, nos quedaría de miedo una mesita Svekongon?

Ayer estuve comprando en un Alcampo a las ocho y media con mi hermano y mi cuñada y la verdad es que tuve una sensación rara. Porque tampoco es que hubiera una gran algarabía, pero para mí, con otra costumbre, era como estar de madrugada en un sitio prohibido, invadiendo. Me fijaba en las caras grisaceas de las cajeras, en el aburrido semblante de los seguratas, y me daba como cosa andar rebuscando en la sección de bebestibles porque, poseido del síndrome de Estocolmo vienés, me imaginaba a los pobres hijos de esa gente esperando a sus padres. Criaturas de mirada perdida, como ternerillos sin cencerro, sentados frente a la tele viendo la repetición número n del rapado capilar de Aramís Fuster o de la dama que abría refrescos con el pechamen.
Creo que me estoy volviendo demasiado europeo. Me lo voy a tener que mirar.

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6 respuestas a «After Hours en Alcampo»

  1. Avatar de J.Insausti
    J.Insausti

    Ten cuidado, esta bien que tengas esos europeo sentimientos, pero tu calla y guardatelos para ti, que un dia de estos te van a dejar de hablar tus amigos y familiares por mojigato, a mi miran raro cada vez que abro la boca.
    En cuanto a los horarios a mi tambien me paso lo mismo, al principio me quejaba, que no se podia ir de compras nunca, excepto en los fines de semana, pero luego los aborigenes te sacan el tema de la siesta, que si close from 2 to 4, que si el horario de trabajo hasta las 7 de la tarde y claro no tienes mas re medio que contestarles: y del marisco que eh?, ni comparacion.

  2. Avatar de Te de llimona

    Pues a mí me parece muy bien que los comercios cierren máximo a las 7 de la tarde. Que no puede ser lo que hay en España. El súper de al lado de mi casa cierra a las 21h. Y a los pobres trabajadores se les nota tan exhaustos, su mirada se torna asesina cuando alguien entra a las 20.30h porque se le ha olvidado algo de antes… (bueno, eso no lo he visto, me lo contó una de ellas un día).

    De todas formas, de la teoría a la práctica supongo que hay un trecho. A ver cómo me sienta no poder ir a comprar a ningún sitio cuando me falte el aceite para cocinar, por ej., a las 8 de la noche.

    Por cierto, ¿tiendas de chinos o de paquis no hay, no :-P?

  3. Avatar de Anonymous
    Anonymous

    Yo me enorgullezco (pero mucho, mucho) de no haber ido jamas de compras un domingo, y se cuentan con los dedos de una mano las veces que puedo haber ido en sábado por la tarde…no me gustan mucho los centros comerciales, la verdad…si, ya lo sé, soy rarita, pero a estas alturas paso de cambiar que me da pereza 😉

    Y si yo que trabajo de lunes a viernes con jornada partida no necesito hacerlo es que no va a ser necesario abrir tantas horas, no?

    Tengo una amiga que trabaja en una cadenas de supermercados y el día 31 trabaja de mañana, como es dia de mucho trajin de ocho a tres (o algo más) y para por la tarde para que no se aburran en su casa con su familia tienen que ir tres horitas a partir de las seis de la tarde para hacer inventario…yupiiiii….

    Un besazo

    Maite

  4. Avatar de María

    ¡Ay! Viva, viva. Yo si voy a las ocho y media de la noche pongo cara de disculpa. Será que mi marido trabaja en una tienda de muebles y los sábados trabajan de 9 a 9 de la noche…. Así que los pobres salen con cara de desesperación. Y no, no es culpa del jefe… es que de verdad es el día que la gente va a mirar lo que necesita.
    Pero es que los horarios españoles son infernales. Aquí tenemos la cultura del calentamiento de silla. (Hay que estar presente aunque no hagas nada….)
    Saludos

  5. Avatar de m.
    m.

    Amén. Lo que tenemos en España no son horarios laborales: son castigos bíblicos. Lo que me resulta muy curioso es que, la mayoría de gente de nuestro país, cree que LOS HORARIOS EUROPEOS SON LOS INVIABLES y que los españoles son los racionales. Curioso, pero cierto. Cuando comento este tema con familiares o conocidos siempre me dicen: “Sí, hombre, ¿y cómo haríamos entonces para ir a comrpar?”, a lo que yo contesto: “¿Y cómo haces ahora para ir a hacer gestiones a los bancos, que sólo abren por la mañana excepto un día en que también abren por la tarde?”. Además, cuando los españoles se van de vacaciones a un país europeo, suelen volver diciendo: “¡Qué horror! ¡A las 6 está todo cerrado! ¡No hay nadie por la calle!”. Normal que les parezca raro. En España, a las 6, la gente está esclavizada en su lugar de trabajo y todavía le quedan tres horas para poder irse a casa. La jornada partida es CRIMINAL. A unas chicas de Londres se les cayó la mandíbula al suelo cuando les conté cómo era la jornada laboral típica en España. Ellas, que a las cuatro abandonaban su lugar de trabajo para no volver hasta el día siguiente, no podían imaginar peor castigo que tener que volver por la tarde y no salir hasta las 8-9 de la noche. La pregunta que me hicieron fue: “Pero, en España, ¿tenéis vida personal”. La respuesta, of course, fue negativa.

  6. Avatar de Paco Bernal

    Hola a todos!
    Muchas gracias por vuestros comentarios y perdón por tardar un poco en contestar.

    a J. Insausti: tranquilo que con el SEER (Síndrome de Estrés del Emigrante Retornado) también viene el PQMEC (Pero qué me estás contando- en Madrid, Pero quémejtajcontando); la gente no te entiende y en tu país todo te parece demencial. Lo del marisco es del todo verdad 🙂

    A te de Llimona: en los últimos meses ha habido un turco que tiene abierto los domingos, aquí detrás pero me pega que con permiso especial. En Alemania está prohibido por ley abrir eldomingo. Así que más vale hacerse una listica…

    A Maite: si lo que yo te digo. A un trabajador austriaco le haces esa putada y te quema el Carrefour con cerillas 🙂 A mí lo del domingo me parece un sindiós también y además creo que no es necesario.

    A Maria: el tema es lo que tú dices: más productividad en menos tiempo. El comercio sigue siendo sacrificado aquí también pero está hecho, conforme el sistema austriaco, para que fastidiándonos todos un poco, ganemos todos también. Y a tu santo y sus companeros, que les sea leve a los hombres.

    A M.: Esto de que estemos de acuerdo se está convirtiendo en una peligrosa constumbre. Nos lo vamos a tener que mirar jajajaja.
    Esto que dices es toda la verdad: es un tópico espanol como ese de “como aquí no se come en ningún sitio”. Pero qué vamos a hacer. Resignación, amiga.

    Saludos a todos

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