29 de Abril.- Aunque la boda real inglesa se salga, completamente además, del tema de este blog, la verdad es que el magno acontecimiento se merece que hagamos un pequeño (y marujil) paréntesis en la temática habitual de Viena Directo.
Antes de tirarnos a tumba abierta al tema del despelleje, un apunte técnico: La boda de Catalina Middleton ha sido digital, la de su suegra, Lady Diana Spencer, fue una boda plenamente analógica. Esto se ve sobre todo en las fotografías. La luminosidad de las tomas actuales frente a los blancos apagados de las tomas químicas, por ejemplo. Aún así, la agradable penumbra que, presumiblemente, reinaba en el interior de Westminster, ha hecho que muchas de las fotos (particularmente las que estaban hechas con teleobjetivos bestias) salieran con muchísimo grano. Me viene a la memoria particularmente la foto que han repetido todas las agencias de David Beckam y su señora esposa. En fin. Esto para la historia.
Vamos a la sangre. De mi blog de notas:
–Catalina Middleton (prefiero esta nomenclatura antes que la vulgaridad de llamarla Kate) es una mujer mucho más bella que su difunta suegra, Lady Diana Spencer y creo que, por lo que parece, bastante menos cursi (no es difícil). Miss Middleton (desde hace unas horas, la flamante duquesa de Cambridge) ha elegido su traje de novia con muchísimo tino y quedado muy por delante de sus predecesoras en el tema este de las bodas reales.
-Otra nota vestimentaria: ¿Son cosas mías o tanto al príncipe Guillermo como al príncipe Enrique el uniforme les quedaba raro? Parecían domadores del Circo Roncalli. Particularmente, el caso del príncipe Enrique, padrino de su hermano, era sangrante.
–Familia Real Celtíbera: bien. En esto hemos quedado como normalmente en Eurovisión: por la mitad de la tabla. Ni hemos estado espectaculares (aunque, a mi parecer, la única que ha estado espectacular ha sido la novia) ni hemos quedado por la cola (rollito gótico inquietante de las hijas del príncipe Andrés y Sarah Fergusson, más bastas ambas que un bocata chapa) ni rollito…En fin, dudoso, de la mujer del vicepresidente del gobierno británico (por cierto, una paisana: Myriam González, se llama).
-Capítulo Familias Reales Europeas: Karl Lagerfeld puede estar tranquilo: Alberto de Mónaco ha conseguido adelgazar para poder entrar en el chaqué. Por lo demás, no mucho que decir: Victoria de Suecia demostrando que tiene unas curvas de vértigo y los Duques de Luxemburgo haciendo buena la máxima de que donde hay cuentas de saldos vertiginosos no hace falta tener palmito que lucir en las revistas del corazón.
-Confirmado: Elton John es incapaz de salir a la calle sin ponerse algo de colores ácidos (qué corbata y qué chaleco, gensanta).
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