Viena a las tres: tu árbol de navidad austriaco ideal

Schonbrunn navidadUna de las cosas que nos llaman la atención a los españoles al venir aquí es que los árboles de navidad son de verdad. Abetos de verdad, generalmente.

Nosotros les decimos que los árboles de plástico son mucho más ecológicos, por reutilizables, naturalmente, y ellos nos miran con cara de horror y nos ponen un argumento de lo más taurino: “pero si estos árboles son cultivados para esto”. “Esto” se refiere a estar en una sala de estar (o salón, dependiendo de los posibles) esparciendo su olor por toda la casa. Este aroma, por cierto, es parte inseparable de la “Navidad experience” austriaca.

Los árboles se compran en muchos sitios (286 puntos de venta) y son mucho más baratos de lo que uno pudiera pensar en principio. Lo mejor es no comprarlos en el centro de Viena sino en lugares algo más apartados. Salen más apañados de precio. Lo ideal es que el árbol sea lo más simétrico posible (ningún árbol es, lógicamente, como los que venden en los chinos en España) y lo ideal también es comprarlo, en lo posible, en fechas cercanas al día 24. Si no se puede por cualquier cosa, hay que tenerlo en el exterior para que, con el frío, se conserve.

Otra cosa que hay que tener en cuenta es que, una vez se ponga el árbol en el interior de la casa de uno, hay que meterlo en un cacharro con agua –en los establecimientos del ramo venden unos soportes ideales para este fin- y, dado que la tradición local es encender velas –de verdad- que están colocadas por el árbol, hay que procurar no descuidarse con la cháchara de la tía Henriette para no morir abrasado en un incendio navideño.

Una vez terminadas las fiestas, el árbol se deposita en unos puntos preparados al efecto. De allí, la ciudad los lleva a una central incineradora, en donde se utilizan para la producción de energía y calefacción.


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3 respuestas a «Viena a las tres: tu árbol de navidad austriaco ideal»

  1. Avatar de Martín González Martínez
    Martín González Martínez

    Saludos. Interesante la analogía del abeto navideño germánico con el toro hispánico. La diferencia podría darse si se considera que el toro es, una vez dentro de la ceremonia taurina, un “numen” http://www.filosofia.org/filomat/df353.htm; mientras que el árbol de Navidad más bien sería un “fetiche” http://www.filosofia.org/filomat/df383.htm. Las ceremonias respectivas propiamente dichas organizadas en torno a uno y otro, siguiendo la clasificación del materialismo filosófico español, serían “radiales” en el caso del árbol, y “angulares” en el caso del toro http://www.filosofia.org/filomat/df249.htm.

  2. Avatar de Martín González Martínez
    Martín González Martínez

    Saludos. Creo que en el caso del árbol las ceremonias estructuradas en torno al mismo serían sobre todo de índole “circular” más que “radial” http://www.filosofia.org/filomat/df244.htm… Perdon por tanta “tralla” filosófica, pero se me ocurre que puede ser un contrapunto sano al exceso de almíbar emocional; estas Santas fiestas son un buen momento para pensar, ahí rodeados de númenes y fetiches, entre ceremonia y ceremonia. En cualquier caso y pidiendo perdón por el excurso, lo más importante: felices fiestas Navideñas a Paco y a los ilustres lectores de VD

    1. Avatar de Paco Bernal
      Paco Bernal

      Felices fiestas para ti también, Martín! Que la navidad sea estupenda y el 2014 a la medida de nuestros mejores deseos. Cuidate mucho. Un abrazo

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