En la segunda y última parte de este artículo, veremos qué hacían algunos austriacos hoy célebres en 2006, cuando Viena Directo echó a andar.
28 de Septiembre.- Y sí: nuestro siguiente personaje que retrocederá en el tiempo será Sebastian Kurz. En 2006, cuando nació Viena Directo, el Ministro de Exteriores de la República austriaca y gran esperanza de la democracia cristiana de EPR tenía 20 años recién cumplidos (los cumple en Agosto) y hacía un año que había hecho el servicio militar. En octubre de 2006 hacía pocos días que se había incorporado a las clases del primer curso de Derecho en la Universidad de Viena, estudios que interrumpió urgido por su carrera política y que, por lo que parece, tardará en terminar. Desde 2003, Sebastian Kurz, por cierto, es socio (¿Miembro? ¿Qué se es de un partido?) bueno, que desde 2003 Sebastian Kurz pertenece al Partido Popular austriaco.
Un hombre que no hace directamente la actualidad, pero que de alguna manera ayuda a modelarla a base de su potente capacidad de análisis, es el periodista Armin Wolf (sobre cuyas idas y venidas también escribo a menudo en este blog). El periodista tirolés tenía, cuando nació Viena Directo 40 años y ya era uno de los pesos pesados (casi cabría decir una de las vacas sagradas) de los informativos de la ORF. En 2006 presentaba ya el telediario (empezó en 2002) alternándose con Ingrid Turnher.
El día 30 de octubre de 2006, nuestra siguiente protagonista, que entonces tenía 37 años, la carintia Eva Glawitschnig , actualmente jefa de los verdes (única mujer hasta ahora en esta enumeración) fue elegida tercera vicepresidenta del parlamento austriaco y más tarde, en 2008, debido a la retirada de Van der Bellen, jefa de los verdes (Die Grünen). Y sigue ahí también, porque ella es así de guapa, de lista y de perfectísima en todas sus cosas. Ese año, en mayo, había nacido su primer hijo, fruto de su matrimonio con un periodista deportivo de la ATV, al que no solo le une la belleza física y el deseo de llevar a la práctica la igualdad entre los sexos (estos dos ojos que se van a comer algún día lejano los gusanitos han visto a la señora Glawitschnig y a su señor marido haciendo campaña por los verdes al alimón), también les une como pareja el llevar los dos un apellido impronunciable, ya que el marido de Glawitschnig se llama Piesczek (algo así como “Pischk”).
Dejamos para el final al presidente electo (el cual tendrá, como todos mis lectores saben, que revalidar su resultado en unas próximas elecciones). Cuando nació Viena Directo, en octubre de 2006, Alexander VdB era la cabeza visible de los verdes austriacos (le sucedería, como sabemos por el párrafo anterior, Eva Glawitschnig). Aún eran buenos tiempos para el verde VdB, porque en las últimas elecciones celebradas, por cierto, tres días antes del nacimiento de Viena Directo, el primero de octubre de 2006, los verdes habían conseguido crecer un poquito (los verdes eran, y son y se venden como tales, un partido “premium” solo para paladares exquisitos, en contra de la ultraderecha que entra dentro de la definición del más puro garrafón). En 2008, en cambio, los verdes diéronse un batacazo (tampoco muy dramático) y perdieron un diez por ciento de los sufragios (o sea, un punto porcentual dentro del electorado general) VdB, entonces, dimitió.
¿Quiénes serán los protagonistas de los próximos diez años? ¿Se atreve alguien a hacer apuestas?
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