¿Recibió el FPÖ dinero de Rusia a cambio de propiciar decisiones políticas? Correos electrónicos publicados por Profil parecen sugerirlo.

4 de Febrero.- Desde principios de este siglo, por razones tan estratégicas como ideológicas, la Federación Rusa ha estado alimentando a los partidos de extrema derecha de toda Europa. El FPÖ incluido, por supuesto.

Aunque era fácil suponer que, junto con la basura ideológica racista y homófoba, también había fluido dinero, hasta ahora, oficialmente, la colaboración entre el FPÖ y la Rusia de Putin solo se había desarrollado en términos altruistas.

Sin embargo, una investigación publicada por el semanario austriaco Profil, en colaboración con otros medios europeos y el Organised Crime and Corruption Reporting Project (OCCRP), ha aportado pruebas de que el FPÖ recibió de Rusia algo más que „consejillos“.

La ley austriaca prohibe taxativamente que los partidos que operen en Austria reciban dinero de potencias extranjeras. De demostrarse que, como parece, el FPÖ recibió dinero de Rusia, se estaría demostrando también que el FPÖ estuvo cometiendo delitos desde por lo menos principios de este siglo.

Unos hechos, sin duda, gravísimos.

Entremos en detalles.

NUESTRO HOMBRE EN VIENA

Según las informaciones aportadas por Profil, el enlace entre el Kremlin y los de Kickl sería un austriaco llamado Robert Stelzl.

Stelzl pasa por ser una figura conocida en la escena ultraderechista y se le ha visto frecuentemente en las manifestaciones de los llamados „Fair denkers“ o sea, los antivacunas reciclados en partidarios de la Rusia de Putin en Europa.

Parece ser que Stelzl trabajaba codo con codo con un ruso llamado Sargis M., antiguo empleado del parlamento de Moscú.

Al parecer, las actividades de Sargis M. , al objeto de influir en la opinión pública europea y tratar de legitimar la ocupación ilegal de la península de Crimea por parte de la Federación Rusa empezaron en 2014.

Sargis M. Participó activamente en la organización de viajes de políticos occidentales a Crimea, incluyendo por supuesto los ultraderechistas austriacos que viajaron como „observadores“ del referendum pantomima que trató de legitimar la invasión rusa.

Esto es lo que indican numerosos e-mails obtenidos, según la investigación de Profil, de la cuenta de Sargis M. Los mensajes abarcan desde marzo de 2007 hasta septiembre de 2017.

Según indican estos mensajes, los esfuerzos de seducción de la propaganda rusa se canalizaban a través de un organismo llamado „Agencia Internacional para la Política Actual“. Los partidos de la extrema derecha europea, incluyendo al FPÖ, se dejaron convertir en dóciles herramientas de Moscú, al objeto de legitimar la invasión de Crimea que, con el tiempo, ha terminado por desembocar en la guerra que los pobres ucranianos sufren actualmente.

YALTA: PUNTO DE ENCUENTRO PARA POLÍTICOS OCCIDENTALES PRORRUSOS

Uno de los „proyectos internacionales“ organizados por Sargis M. Fue el llamado „Foro económico internacional de Yalta“, en abril de 2016. Ese año estuvieron en Crimea Barbara Rosenkranz -que fue candidata ultra a la presidencia de Austria y su compañero de partido Axel Kassegger, que sigue siendo diputado del FPÖ. Según un archivo adjunto en uno de los correos electrónicos interceptados, los dos políticos habrían recibido unos honorarios principescos (4000 euros por cabeza) por personarse en Crimea. Los dos políticos, por supuesto, lo niegan.

Cuando estuvieron en Crimea, Rosenkranz Kassegger se reunieron con dos peces gordos rusos, Serguéi Aksiónov, el “primer ministro” de la península del Mar Negro y Oleg Benaventsev, antiguo representante plenipotenciario de Putin en Crimea. Los dos jerarcas del régimen de Moscú están en la lista de personas sancionadas por la Unión Europea desde 2014.

Unas semanas del viaje a Yalta, Stelzl y Sargis M. estrecharon su contacto a través de llamadas telefónicas y del servicio de mensajería WeChat. Como es natural, estas conversaciones no dejaron huella y no se han podido analizar.

Stelzl trabajó en estrecha colaboración no solo con Sargis M. sino con un tal Piskorski, ultraderechista polaco que fue detenido por pasar información a los servicios secretos rusos, aunque luego fue liberado, y con su mujer, Marina K..

De esta fructífera colaboración surgió la organización del viaje de la delegación italiana. Stelzl se ocupó de los trámites de visado de los italianos, e incluso de los regalos que los italianos llevarían a Crimea (“loads of very good and nice presents like top wines, Venetian Murrano glass, etc”).

Puestos a conseguir, parece ser que Stelzl también utilizó sus contactos para transmitir a Moscú los deseos de una empresa italiana que quería que las aduanas rusas la trataran “con amor”. No se sabe si tuvo éxito. Stelzl estuvo en Crimea también e hizo un chorro de fotos y grabó un montón de vídeos, que le mandó a Sargis M. Entre ellos, uno de Stefano Valdegamberi (político ultra italiano vinculado a la Lega Nord) cantando “O sole mío”.

MOCIÓN CON EMOCIÓN

Según parece, Sargis M. también envió correos a otro experto en relaciones públicas. Fue el 21 de Junio de 2016. Su objetivo era que el Parlamento austriaco aprobase una moción, a iniciativa del FPÖ y con el apoyo del entonces existente Team Stronach, para el levantamiento de las sanciones a Moscú. Según el documento, el diputado ultra Johannes Hübner debía actuar como “portavoz” en este asunto. Los “costes” estimados eran de 20.000 euros mas 15.000 más si la moción tenía éxito.

La moción, por cierto, se registró, el 6 de Julio de 2016, y Hübner fue su portavoz. Cuando el trasfondo de la cuestión se hizo público, en 2022, el diputado ultra no respondió directamente si había recibido pagos por este asunto, pero el grupo parlamentario del FPÖ emitió un comunicado en el que aseguraba que ni Hübner ni nadie del FPÖ habían recibido dinero.

(Si no era verdad, admitirlo hubiera sido admitir la comisión de un delito).

La moción de Hübner fue rechazada por el parlamento austriaco pero un día más tarde el parlamento chipriota sí que aprobó una parecida a favor de Moscú. La resolución del Parlamento de Chipre se cita como proyecto de referencia dentro de la documentación del grupo de presión “Agencia Internacional de Política Actual”.

Hübner también viajó a Crimea, por cierto. Fue en la primavera de 2017. Johann Gudenus, vicealcalde de Viena en aquel momento, también fue invitado, pero se ve que le vino mal y al final no fue. No hay (de momento) prueba documental de ningún contacto entre Gudenus y Sargis M.

De cualquier manera, Gudenus ha negado conocer al “conseguidor” aunque sus contactos con Rusia han sido y son frecuentísimos. Gudenus habla ruso y, por lo menos hasta el estallido de la guerra de Ucrania, el otrora “hijo predilecto” de Strache y joven promesa de la extrema derecha austriaca, ha hecho de los contactos con el régimen de Putin su profesión.

Otro ultra austriaco que aparece en los correos interceptados es el ex teniente de alcalde de Linz, Detlef Wimmer. En mayo de 2017, una nutrida delegación del FPÖ de Linz viajó a Moscú. Según los correos, Wimmer le preguntó de antemano a Sargis M. si podía organizar reuniones con jerifaltes moscovitas.

Wimmer no se ha querido pronunciar al respecto, por cierto.

Stelzl sí que se ha pronunciado. A preguntas de Profil ha respondido que “manifestar posiciones prorrusas es legal y perfectamente legítimo” y que, de hecho, lo ha hecho así en Servus TV en varias ocasiones. Stelzl ha manifestado también que está estudiando acciones legales por la difusión de correos “evidentemente manipulados” y sacados de contexto.

No oculta su participación en las manifestaciones a favor de Rusia de los llamados “Fair Denkers”.