Lucha contra la desinformación: está en tu mano

Un hombre con un ordenador crea noticias falsas (AI/Leonardo)

Estamos en un „superaño” electoral. Se espera que la batalla de al desinformación arrecie ¿Cómo distinguir las noticias falsas? Viena Directo te ayuda.

El boletín de Viena Directo se envía los martes y los viernes. Puedes suscribirte en www.vienadirecto.substack.com 

30 de Enero.- Estamos en un „superaño” electoral. Una parte muy importante de la humanidad va a acudir a las urnas este año. En Austria, dos veces. Y hay una cosa de la que podemos todos estar muy seguros: ya hay alguien pensando en cómo hackear nuestras democracias. Esa es la mala noticia.

El candidato más obvio es el Gobierno ruso que con sus granjas de trolls lleva años realizando una labor de zapa para intentar fragmentar la Unión Europea y provocar su desaparición (es el sueño húmedo de los ideólogos del Kremlin y de sus secuaces). Pero también hay otras potencias interesadas, como China. Las campañas masivas suelen estar muy bien hechas y, por desgracia, se detectan tarde. Es el caso del medio millón de cuentas de Twitter falsas que, desde Rusia, han estado difundiendo información engañosa para intentar quebrar el Gobierno alemán y que, en buena medida, son por ejemplo responsables de repicar los mensajes de la extrema derecha alemana.

La buena noticia es que la desinformación es relativamente fácil de detectar, por lo menos a un nivel básico y que todos podemos hacer muchísimo para parar su difusión.

Imagen obtenida por AI (getimg.ai)

TÚ PUEDES PARAR LA DESINFORMACIÓN

En primer lugar, el consejo básico es la desconfianza. Si una determinada información no viene de una fuente solvente, por ejemplo un periódico grande, con una marca conocida, o una cadena de televisión o radio con un prestigio asentado, se imponen las comprobaciones.

¿Por qué confiar en los medios tradicionales? La respuesta es obvia: porque, aunque no sean perfectos, tienen experiencia a la hora de cribar lo que es auténtico y lo que no. Por eso las campañas de desinformación suelen ser más sibilinas y nos llegan a través de redes que escapan al filtrado de los profesionales de la información. Singularmente a través de cadenas de mensajes de WhatsApp o, más aún, de Telegram.

SEIS CARACTERÍSTICAS DE LAS NOTICIAS FALSAS

Por eso, hay que estar en guardia y tener presentes algunas características de las noticias falsas:

La primera y más obvia es la intencionalidad. O sea, si hay quinientas personas sentadas en un edificio de Moscú o de Nivni Novgorod tomándose la molestia de producir unos contenidos que son muy refinados y que se estudian a fondo es porque sus jefes tienen un objetivo ¿Y cuáles son esos objetivos? Pues son tan viejos como el mundo: desde la pura y simple desestabilización a intentar poner en el poder a partidos o candidatos afines a sus intereses.

Rusia lleva inyectando dinero desde principios de siglo en los partidos y movimientos de la extrema derecha europea, por ejemplo.

Imagen obtenida con IA (Leonardo)

La segunda característica de la desinformación es que es atractiva: es la comida basura del cerebro. Y lo mismo que la comida basura funciona básicamente con tres elementos a los que no nos podemos resistir, esto es, la grasa, el azúcar y la sal, la desinformación trabaja también con mecanismos que nos resultan irresistibles. Por ejemplo, el uso de caras famosas o de personas sexualmente atractivas para colar mensajes.

La desinformación resulta tan atractiva porque los que la elaboran son profesionales del engaño que conocen ese resorte que te mueve a dar click y leer más.

La tercera característica es que la desinformación está diseñada para provocar emociones. Rabia, por ejemplo. Un procedimiento clásico de la desinformación. Por ejemplo, un post de Twitter en el que se diga que mientras que los agricultores europeos sufren sometidos a rigurosos controles ecológicos la Unión Europea permite la importación masiva de alimentos producidos utilizando pesticidas venenosos. Otro caso clásico, que se suele utilizar en periodos electorales es provocar la confrontación de ricos contra pobres. Es un argumento que la extrema derecha austriaca ha utilizado en miles de ocasiones y del que Herbert Kickl saca partido sin parar. Por ejemplo, atribuyéndose la defensa del hombre corriente frente a los políticos y los medios “del sistema”.

La cuarta característica es que la desinformación es más potente cuanta menos información fiable haya. Lo vimos en la pandemia (como tantas otras cosas). Al principio, cuando no sabíamos nada del coronavirus, florecieron las teorías más locas (algunas de las cuales, desgraciadamente, conviven hoy). El ser humano necesita información para sentir seguridad. Saber qué podemos esperar de nuestro entorno nos tranquiliza. Y cuando no hay información disponible que sacie nuestro hambre de saber, nos tiramos a lo que sea. Es decir, a los contenidos que están diseñados para que desconfiemos de las autoridades o para que sintamos miedo.

La quinta característica es que, por lo general, nos llega por personas en las que confiamos porque son, por ejemplo, personas de nuestro círculo de amigos o de nuestra familia. Con esas personas, bajamos la guardia.

La sexta y quizá la más relevante es que la desinformación está concebida para funcionar en internet como un pepino. O sea, para volverse viral, para que la compartamos sin pensar.

SI SOSPECHAS, HAZTE ESTAS PREGUNTAS

Por eso, ante una noticia “sospechosa” hay que hacerse algunas preguntas:

¿De dónde viene?

¿Es una noticia “demasiado bonita”? Esto es ¿Se adapta esta noticia a lo que quiero oír?

¿Quién podría estar interesado en que yo creyera que esta noticia es verdad? ¿A quién beneficia que yo comparta esta información?

¿Dónde puedo comprobar que esta noticia es cierta? ¿La he visto en varios medios? (Nosotros, los que vivimos en Austria, lo tenemos todavía más fácil, si una noticia ha salido en medios austriacos y españoles, es más probable que sea verdad).

Y por último, un consejo: cuando sientas que el dedo se te va al botón de “compartir” cuenta antes hasta diez.

 

Matar a la austriaca (3) – ¿Por qué murió Erika Hechenleitner?

Publicado

en

por

Etiquetas:

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.