El presidente de Eslovaquia, Robert Fico, ha sufrido hoy un atentado. El asunto, como es natural, ha suscitado mucha atención en Austria.
15 de Mayo.- Hoy los madrileños celebran el día de San Isidro, que es el ideal de cualquier español que se precie. Cuenta la leyenda que mientras él estaba tomándose unos gintonics con los coleguis en el Barrio de las Letras, o solazándose con su mujer, la también santa María de la Cabeza, los ángeles le araban el campo. Claro, los ángeles, al ser el colmo de la mansedumbre, no se quejaban a Dios padre de semejante explotación.
El que no ha sido para nada manso, más bien todo lo contrario, ha sido el escritor de setenta y un años que ha intentado hoy matar al primer ministro de nuestra república vecina, Eslovaquia, el Sr. D. Robert Fico (pronúnciese algo así como “Fidso”). Fico estaba en una ciudad a unos 180 kilómetros de Bratislava. Al salir de un centro cultural, cuando se disponía a “politiquear” un poco, o sea, a besar niños, estrechar manos y esas cosas, el escritor, según fuentes locales, le ha disparado cinco veces. En dos ocasiones, ha errado el tiro, en otras dos le ha dado en la mano al mandatario y el quinto disparo ha sido el peor, porque le ha impactado en el vientre.
De las heridas exactas que ha sufrido Fico no se sabe mucho más, porque el Gobierno eslovaco no ha dado más datos. Sólo se sabe que, debido a este agujero extra que le han abierto, el pobre señor está muy grave y se debate entre la vida y la muerte.
Seria ha debido de ser la cosa porque, tras el intento de magnicidio, le han llevado, todavía consciente, a una clínica cercana en donde “le han hecho un hilván” y después, para “pasarle a máquina”, le han acercado a Bratislava. El gobierno ha aclarado que tenían miedo de que no sobreviviese a un viaje tan largo.
La sociedad eslovaca se encuentra por lo visto muy polarizada. Aprovechando las posibilidades que da la tecnología yo he estado leyendo los periódicos eslovacos nada más me he enterado de lo sucedido y la verdad es que el partido de Fico no se anda con chiquitas. Al saberse lo que había sucedido, se ha interrumpido la sesión del Parlamento eslovaco que se estaba desarrollando en ese momento. Los diputados de la formación de Fico (de ultraizquierda y, para más ardor, simpatizantes del putín de Putin) han empezado a insultar a los diputados de la oposición. Uno de ellos, incluso, les ha dicho a los de la bancada de enfrente que “se escondieran, que iban a ir a por ellos” (lo cual no son formas, francamente). Otro ha acusado a los periodistas de ser (textual) unos “cochinos cerdos” y les ha jurado odio eterno haciéndoles responsables de la crispación.
El presidente del parlamento les ha llamado al orden, pero ya sus palabras se habían escapado, como decía Homero, “del cercado de sus dientes”.
Fico volvió al poder hace unos meses, tras haber tenido que dimitir acusado de corrupción, y basta leer su historial para darse cuenta de que es una joyita visigoda digna del tesoro de Guarrazar. Ahora bien, como es natural, ser un populista y morirse por los huesos de Putin, tampoco son razones para merecer la muerte.
Esas cosas no se hacen.
De cualquier forma, las razones del animal que ha apretado el gatillo se desconocen.
Se sabe que el arma era suya y que tenía permiso legal para tenerla. Hace unos años, el presunto había sido él mismo víctima de un atentado y casi no lo cuenta (un tipo, drogado perdido, había intentado matarle).
En los próximos días sabremos si ha sido debido a algún asunto turbio relacionado con Fico, por motivos políticos o por qué. Algunos medios sostienen la teoría de que el atentado hubiera podido ser debido a la crispación existente debido a la pretensión de Fico de disolver la radiotelevisión pública eslovaca (RTVS). Medida que se debate estos días.
Las manifestaciones de protesta convocadas contra esta decisión se han suspendido, como es natural.
Tanto políticos de la oposición como del partido de Fico han condenado el atentado, así como la presidenta de Eslovaquia (y adversaria política) Zuzana Caputová. También los representantes de los socios europeos de Eslovaquia, de la Presidenta de la Comisión, doña Ursula von der Leyen, para abajo. Incluso Putin ha condenado el intento de asesinato de Fico, lo mismo que Biden y hasta Selenski.
En Austria, diversas personalidades han condenado también el atentado, incluyendo al canciller Nehammer, que ha dicho que reza por la pronta recuperación de Fico (quién sabe si con una novena a San Isidro) y que hace dos días estuvo hablando con él. Hay que tener en cuenta que son nuestros vecinos de al lado y los Gobiernos de Viena y de Bratislava mantienen estrechas relaciones de vecindad. En el momento en el que escribo esto, la ORF tiene un programa especial sobre lo sucedido.
En este momento llega la noticia de que a las diez y media habrá una conferencia de prensa en la que se informará del estado del mandatario herido.
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