Europa trata de coordinarse para afrontar una nueva era sin la protección de los Estados Unidos ¿Cómo afectará a Austria este nuevo enfoque?
6 de marzo.- Parece bastante claro que nos encontramos al final de una época. La llamada Pax Americana, que empezó a gestarse aún durante la segunda guerra mundial, y que entró en vigor en 1945 con la creación de un nuevo orden a escala planetaria, cuyas instituciones fundamentales eran las que formaban el paraguas de Naciones Unidas, se está resquebrajando por momentos.
El principal garante de esa paz, los Estados Unidos, no está en condiciones de mantener su papel. Las prósperas clases medias de antaño han sufrido un brutal golpe a su nivel de vida y décadas de conflictos por todo el mundo han privado a los Estados Unidos de enormes cantidades de personas en la mejor edad de sus carreras laborales. Lo mismo puede decirse del sistema educativo de los Estados Unidos.
Un sistema educativo fuerte y de calidad para todas las clases sociales permitía que las mejores cabezas progresaran y las desigualdades del país se aplanaran, de manera que el aprovechamiento máximo del talento llevara a los Estados Unidos a gozar de una ventaja competitiva a nivel mundial.
Como sucede en otras partes del planeta, el ascensor social de los Estados Unidos está roto y los puestos de poder han sido colonizados por gente de un nivel cultural misérrimo. Lo primero que ha hecho el nuevo Gobierno al subir al poder ha sido poner en cuestión el papel de la ciencia en la sociedad. Por ejemplo, el equivalente al Ministro de Sanidad de los Estados Unidos ha suspendido esta semana la reunión de la Agencia Federal del Medicamento que decide las cepas de la gripe que se combinarán en la próxima vacuna. El tipo es un antivacunas furibundo. Todos sabemos lo que va a pasar.
El programa de “optimización” de la administración pública también ha dejado sin fondos numerosísimos programas de investigación por todo el país. Miles de científicos del más alto nivel están sin trabajo en estos momentos, en un país, por cierto, en el que la protección social es mínima.
Estados Unidos está rompiendo aceleradamente con sus aliados, el principal la Unión Europea.
Hoy, como saben todos mis lectores, se ha convocado una cumbre extraordinaria en Bruselas en la que los 27 van a decidir su política de defensa futura. Se habla de rearme. Una palabra que recuerda a tiempos muchísimo más oscuros.
Austria es un país neutral (aunque habría que decir mejor “no alineado”) pero su nuevo Gobierno, recién investido, ya ha tomado posiciones. La Ministra de Exteriores, Beate Meinl-Reisinger, ha declarado hoy a los periodistas que Austria seguirá siendo un “socio fiable” dentro del marco de la Unión Europea, como ya lo ha sido otras veces, y que la noción de neutralidad, clave en el sistema jurídico austriaco, no va a sufrir al respecto.
Pero ¿Qué puede significar esta nueva política de la Unión Europea para Austria?
En principio, aparte de integrarse en el nuevo sistema de misiles, el Skyshield, Austria va a continuar con el aumento del gasto de defensa que ya anunció la anterior coalición entre conservadores y verdes.
De aquí a 2032, el Gobierno austriaco ha anunciado unas inversiones en el ejército de 17.000 millones de euros.
El gasto en defensa va a aumentar hasta alcanzar el 2% del producto interior bruto, nivel de gasto en defensa que hasta ahora era el de los miembros de la OTAN.
Por supuesto, y en contra de lo que hubiera hecho un Gobierno de la extrema derecha (naturalmente prorruso) Austria va a estar del lado de Ucrania.
Desde fuentes gubernamentales se remarca mucho que Austria está con Ucrania “políticamente y no militarmente”. Austria no ha mandado armas pero ha ayudado a financiarlas y los transportes de armas con destino a territorio ucraniano han pasado por territorio austriaco. Asimismo, Austria ha colaborado en las sanciones contra el invasor ruso.
Por supuesto, y sin que sea sorprendente, las críticas a este estado de cosas han venido de la extrema derecha. Ayer, portavoces del FPÖ hablaban de los peligros del “rearme” como si Europa fuera a convertirse en un estado agresor como es la Rusia que ellos admiran y que ha hecho tanto por ellos en el pasado.
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