¿Cuando volverán los trenes al servicio normal?- ¿Cuándo se podrá volver a visitar a los abuelos? – ¿Tendremos pronto una vacuna? – ¿Qué dos eventos vieneses se cancelan? – ¿Qué quieren los sindicatos? – ¿Qué cosa buena han hecho los políticos austriacos?
22 de Abril.- Muy buenas tardes a todos y bienvenidos un día más a la segunda edición de Viena Directo, el blog de quienes quieren estar informados y no solamente entretenidos.
Como siempre, nos detendremos en primer lugar en las cifras de nuevos contagiados.
Como ya decía en el avance, hace unos momentos, hoy ha sido (otra vez) un día estupendo en este aspecto.
El Ministerio de Sanidad ha informado que ha sido el día en que menos nuevos contagios se han dado desde que hay mediciones. Solo han aumentado un 0,34% desde el día de ayer.
También el número de altas es muy bueno: 11328 en total. No así el de fallecimientos, que hoy ha pasado la barrera de los quinientos. 510 personas nos han dejado debido al coronavirus, entre ellos, por cierto, un hombre de cuarenta y un años que no tenía dolencias previas (ha fallecido en el hospital de Braunau).
Menciono esto para recordarles a mis lectores que la precaución sigue siendo necesaria, porque no se puede confiar en que vaya a haber pronto una vacuna (hay informaciones al respecto, como luego veremos) y, aunque la hubiera en los próximos meses, tiempo hay de que pasen desgracias.
Así que, por favor:
–Lavarse las manos con jabón, frecuencia y agua tibia.
-Toser o estornudar en un pañuelo o en la parte interna del codo.
Y, sobre todo:
-Mantener la distancia de seguridad con nuestros semejantes (un metro o mejor dos)
-Como mis lectores saben, está próximo el momento en el que la actividad económica volverá a Esta Pequeña República. Abrirán las tiendas que estaban cerradas, podrá la gente librarse de los molestos vellos supérfluos, se iniciará la operación raíces y puntas, y las esteticistas volverán a dejar a este país resplandeciente (bueno, será un resplandor de mírame y no me toques, por el tema de la distacia de seguridad, pero bueno).
También irán abriendo las escuelas y los jóvenes colegiales volverán a alegrar el espacio público.
A toda esta gente, habrá que moverla de un sitio para otro, digo yo, pero por lo que parece los ferrocarriles austriacos no están muy por la labor de volver a prestar servicio con la frecuencia normal.
Como recorarán mis lectores, la frecuencia de los trenes se fue reduciendo para que las personas que trabajan en la ÖBB pudieran cumplir las reglas impuestas por el Gobierno pero también porque había menos viajeros (entre un 80 y un 90%).
Las regiones de Baja Austria y de Burgenland ya le han pedido a los ferrocarriles austriacos que se piensen volver a poner en marcha todos los trenes, pero la compañía es reticente.
A partir del día 4 de Mayo, se estudiará la evolución de las cifras y, dependiendo de ella, ya se verá. Según datos de la compañía, el número de viajeros sube todos los días, desde el catorce de abril, un 1,5 por ciento, de manera que todavía hay capacidad suficiente para que se pueda guardar la distancia de seguridad en los trenes (como usuario, doy fe).
Se espera que el servicio se reanude a partir del momento en que se abran las escuelas.
-Desde el principio de la crisis, al objeto de proteger a las personas mayores se cancelaron las visitas en las residencias de ancianos. En la región de Burgenland se van a empezar a levantar las primeras restricciones y a permitir que los familiares visiten a los abuelos. Se hará contando con medidas de seguridad como, por ejemplo, medir la fiebre a la entrada de las residencias, la obligación de desinfectarse las manos y de llevar mascarilla y, por supuesto, la distancia de seguridad.
–En el post anterior hablábamos de que el Sr. Bachmann, de Suiza, estaba muy contento porque pensaba que la vacuna contra el virus malandrín estaría lista a partir de octubre. Pues parece que no.
Severin Schwan, una señora austriaca que dirige la compañía suiza, se ha encargado de desinflar el globo de nuestras esperanzas, diciendo que hasta 2021 ni hablar del peluquín.
¿Quién tendrá razón?
Le recuerdo a mis lectores que, en este momento, hay que se sepa 70 equipos diferentes intentando encontrar la vacuna o un medicamento que mejore a los pachuchos.
Naturalmente, lo hacen un por una parte por ayudar a la Humanidad pero, por otra, también lo hacen porque quien encuentre la vacuna habrá encontrado también el negocio de su vida.
-Volviendo a la capital de Esta Pequeña República, hoy se ha conocido la cancelación de las ediciones 2020 de dos citas que suelen ser ineludibles.
Desde hace unos años es justamente popular la Wiener Wiesn, que es la sucursal austriaca de la Oktoberfest de Münich. Yo voy todos los años y suele ser una fiesta divertidísima (cara, las cosas como son, pero divertidísima).
Debería haberse celebrado entre el 24 de Septiembre y el 11 de Octubre, pero este año no habrá señoritas enseñando la leña que tienen delante de la choza (ejem) ni caballeros mostrando que la pantorrilla es una parte sexi del varón.
Los organizadores de la Wiener Wiesn han dicho que, por sentido común, lo dejarán para mejor ocasión, aunque también han anunciado que, para que la gente no llore, ni se eche a pecho una botella de lejía, ni haga ninguna tontería semejante, habrá una gran sorpresa para los fans ¿Qué será? Lo sabremos en unos meses.
También se han cancelado los Afrika Tage (o días africanos). Cachis en la mar, porque todos los años este servidor de todos sus lectores hace propósito de ir, pero no hay forma nunca por hache o por bé.
La buena noticia es que en 2021 nos esperará en el escenario el enorme Youssou Ndour. Habrá que tener paciencia.
-Como recordarán mis lectores, la importación de trabajadores de la Europa pobre para ayudar en las cosechas (la recogida de espárragos, ese oficio especializado) levantó enorme polémica. Socialistas y ultraderecha decían que, estando aquí el trabajo como está (y peor, como va a estar) tenía guasa que la patronal agrícola de Tirol fletase un avión para traer a gente de Rumanía y de Bulgaria (y aunque no lo decían, debían también de pensar que, cuando podían hacerlo, es que les pagaban a los obreros tal miseria que podían permitirse el avión y tenerlos haciendo cuarentena dos semanas).
Para evitar esto, los sindicatos austriacos y la plataforma Sezonieri han pedido que el Estado regule los sueldos de los trabajadores que cosechan y que se garantice el sueldo mínimo según convenio colectivo, que son 1500 Euros (brutos).
Han pedido al Estado que acepte su responsabilidad social y que corrija al mercado, que, en su opinión, ha fracasado en este punto.
-Sin dejar el tema del dinero. Aunque por razones de espacio yo no he podido incluir la noticia, estos días se ha sabido que los miembros conservadores del Gobierno austriaco han renunciado a un mes de su sueldo para donarlo a organizaciones altruistas de su elección.
Cuando se supo, poco a poco se fueron sumando otras personas a esta loable inciativa, entre ellas el Presidente de la República, Alexander van der Bellen.
Que yo sepa, los Verdes de momento no se han sumado.
El grupo parlamentario socialista ha donado 65.000 Euros a la “Netzwerk österreichischer Frauen- und Mädchenberatungsstellen” que se encarga, como su propio nombre indica, de asesorar a chicas jóvenes y a mujeres.
Pamela Rendi-Wagner ha dicho que es consciente de que este dinero no va a cambiar la realidad de esta organización de una forma duradera, pero que cualquier ayuda es poca en estos tiempos y ha aprovechado para pedir que esta organización tenga más apoyo público del Estado (Pamela Rendi-Wagner fue Ministra de la Mujer, que en su época también estaba en sus competencias como Ministra de Sanidad).
En fin: y con esta noticia de políticos haciendo cosas buenas por los demás, me despido hasta mañana, deseándoles a todos los lectores de Viena Directo que pasen un final del día felicísimo y que se conserven sanos y buenos.
Un cordialísimo saludo y hasta mañana a eso de la una.
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