Tres millones de fallecidos por la pandemia en todo el mundo – la visión del mundo de un político austriaco cambia después de haber estado en peligro de muerte por la CoVid – Strache quiere volver al FPÖ (pero nadie más quiere que vuelva).

17 de Abril.- Desde que empezó la pandemia, la página web de la universidad Johns Hopkins ha sido una fuente fiable de información, sobre todo en cuanto a la evolución del número de casos a lo largo del tiempo.

TRES MILLONES DE FALLECIDOS EN TODO EL MUNDO

La página se nutre de los datos proporcionados por los diferentes Gobiernos nacionales. Hoy por la mañana, la página de la Johns Hopkins University ha levantado acta de una triste marca: se han superado los tres millones de muertos en todo el mundo a causa de la pandemia (3.001.068).

En números redondos, la población de una ciudad como Madrid y un tercio aproximadamente de todos los habitantes de Austria.

Hasta el momento, se han podido detectar 140 millones de infectados.

La luctuosa clasificación de los fallecimientos la encabezan los Estados Unidos de América con 566.224 muertos (por poner el dato en perspectiva, en la guerra de Vietnam murieron 59000 soldados estadounidenses), Brasil sigue con 368.749 fallecidos, en México han muerto 211.693 personas, en la India 175.649 y en Gran Bretaña 127.472.

En Austria, hasta el momento han fallecido 9593 personas bien directamente de coronavirus o a causa de otras afecciones agravadas por el virus.

Lo peor y más alarmante es que el crecimiento de los fallecimientos ha sufrido una aceleración.

El millón de muertos se notificó el 28 de Septiembre de 2020. Los dos millones de fallecidos llegaron el 15 de Enero de 2021 y los tres millones, hoy tres meses después.

Estos son los números malos. Sin embargo, también hay cifras buenas: con fecha de hoy, se han inoculado 841 millones de dosis de las diferentes vacunas (esta cifra la da el New York Times).

Una pequeña fraccción de esas vacunas se han puesto en Esta Pequeña República. Este sábado, según datos oficiales, 2.4403.476 dosis han sido inyectadas. Por lo menos un 22,7 por ciento de los mayores de 16 años han recibido por lo menos un pinchazo. Un nueve por ciento están totalmente protegidos.

Este viernes 64.289 recibieron el pinchazo que es el pasaporte a una vida normal.

ANTE LA PROXIMIDAD DE LA MUERTE, LA VISIÓN DEL MUNDO CAMBIA

Recordarán mis lectores, que un político ultraderechista, Manfred Haimbuchner, enfermó de coronavirus en estas semanas pasadas.

Su estado se volvió tan grave que pasó varios días en cuidados intensivos en coma inducido (lo cual, para un virus que, según su partido no es para tanto, no deja de ser chocante).

Hoy se ha publicado una entrevista, la primera desde su enfermedad, que Haimbuchner ha concedido a un medio austriaco. Ha sido al Kronen Zeitung, en donde el ex „no-es-para-tantista“ ha ofrecido una detallada descripción del curso de su enfermedad y ha revelado que estuvo en peligro de muerte.

Haimbuchner ha declarado que, al principio, tomó la infección por cosa de poco, pero que esta evolucionó rápidamente hasta motivar su ingreso en hospital.

Haimbuchner se muestra agradecido por su „segunda vida“ y ha declarado que quiere aprovechar más el tiempo para dárselo a sus hijos y a su familia.

Naturalmente, en el Kronen Zeitung le han preguntado qué piensa de la polémica entre sus dos jefes, Norbert Hofer y Herbert Kickl, a propósito de las mascarillas en el Parlamento.

Haimbuchner se ha posicionado a favor de llevar mascarilla y, por lo tanto, a favor de Norbert Hofer, aunque no lo ha dicho explícitamente. Ha evitado cuidadosamente cualquier crítica a Herbert Kickl, sin embargo, argumentando que el jefe del grupo parlamentario ultraderechista, mientras lo sea, merece la „máxima lealtad“. También ha dicho que le parecería muy bien que Norbert Hofer se presentase otra vez a candidato a la presidencia de Esta Pequeña República (Dios y la virhensita del Coromoto lo eviten). Aún así, ha dicho sentir gran aprecio por Van der Bellen (no es extraño, porque es un Bundespresidente bundesgenial).

STRACHE QUIERE VOLVER AL FPÖ (PERO NADIE LE QUIERE ALLÍ)

Y por si al Fpö le faltara algo, hoy se ha sabido que Heinz-Christian Strache quiere volver a la que fue su casa.

Quizá tenga que ver con que esta semana se ha sabido que el que fue capitán general de los ultraderechistas austriacos y vicecanciller de Esta Pequeña República, se enfrenta a una pena potencial de cinco años de prisión, acusado de cohecho.

Según la demanda, Strache aceptó una compensación económica de un amigo a cambio de cambiar una ley para que la clínica privada de este coleguita suyo se beneficiara de ciertas ventajas administrativas.

En el único lugar en donde, en estos momentos, le dan carrete (en los platós de OE24, a los que acude a tanto la pieza como cualquier tertuliano) se ha posicionado a favor de Hofer en la disputa de las mascarillas, aunque ha llamado a Hofer „cobarde“ por no imponer su posición con más fuerza, se conoce.

En unas declaraciones que no puedo calificar sino de deliciosas, Strache ha dicho que él y sus antiguos compañeros de partido „forman una gran familia que, como todas las familias a veces se pelea“ y luego ha dicho que „él es parte de esa familia y que, como tal, va a tomar las medidas administrativas necesarias para volver al redil.

Si estas declaraciones ya hacen sospechar que Strache, antes de hacerla, le había pegado un buen viaje a una bebida espirituosa, lo siguiente, o sea „que tendía la mano a Kickl“ hace sospechar que el antiguo jefe de los ultraderechistas austriacos debe de estar pasando por una fase de confusión que ha afectado a su percepción de la realidad.

(Si no, no se explica).

Norbert Hofer, depositario del honor de gozar de la confianza de Strache, ha dicho (!Chorprechaaa!) que las declaraciones de su antiguo compañero de filas „no merecían ningún comentario“

El que sí ha valorado el intento de acercamiento de Strache ha sido el secretario general de los ultraderechistas, Michael Schnedlitz el cual ha recalcado (!Chorprechaaa!) que para Strache „no hay vuelta al FPÖ“ porque con su comportamiento se ha autoexpulsado del partido.

En fin, chascarrillos que pasan en todas las familias.