Miles de personas de la sociedad civil se han manifestado hoy en Graz para protestar contra la extrema derecha.
3 de Febrero.- Hace alrededor de una semana, miles de personas se manifestaron en Viena, en Innsbruck y en Salzburgo para protestar contra la extrema derecha. En Viena, la manifestación fue multitudinaria, superando incluso las expectativas de los organizadores, que no esperaban tanta afluencia de gente debido al mal tiempo.
Sin embargo, se produjeron algunos incidentes cuando, aprovechando un fallo de seguridad en el Parlamento austriaco, un grupo de los ultraderechistas llamados identitarios, entre los cuales estaba Martin Sellner, su jefe, llegó a la azotea del edificio y lanzó bengalas contra la gente allí reunida.
Hoy, en Graz, se ha repetido la manifestación, esta vez sin incidentes, convocada por la “Alianza por los Derechos Humanos y la Democracia”.
En cuanto a la asistencia, hay baile de cifras, como suele suceder en estos casos.
Los organizadores hablan de diez mil asistentes, en tanto que la APA (la agencia de prensa austriaca) habla de unas cinco mil personas.
La manifestación ha terminado con un “mar de luces” con las linternas de sus teléfonos móviles.
En el curso de la manifestación la gente ha llevado pancartas, en general humorísticas, relacionadas por ejemplo, con la “remigración”.
La nueva extrema derecha (los indentitarios, de los que hablábamos más arriba, por ejemplo) intentan colar sus mensajes (de mierda) disfrazándolos con estos términos que intentan enmascarar sus verdaderos propósitos, o sea, y como ya acordaron representantes de los ultras europeos en Potsdam, la deportación de personas extranjeras en cuanto lleguen al poder.
(Dios lo evite).
La alianza que ha convocado la manifestación está formada por unas 135 asociaciones que se han asociado en una “unidad de acción”.
La alianza se ha formado, según una de sus portavoces, de manera bastante espontánea. Hace una semana, representantes de la sociedad civil de Estiria se plantearon copiar en Graz la manifestación de Viena ante el parlamento.
En esta reunión preliminar ya se acordó que la manifestación tendría dos partes: por un lado una serie de discursos que serían pronunciados por personas no pertenecientes al ámbito de la política, para que la concentración fuera lo más transversal y apolítica posible.
Por ejemplo, una de las oradoras ha sido una representante de “Omas gegen Rechts” (las abuelas contra la derecha). Una organización de activistas mayores famosas por ejemplo por sus vigilias para llamar la atención sobre las condiciones de vida de los refugiados.
Por otro lado, también una parte artística. Ambas confluirían, como así ha sido, en la Plaza Mayor de Graz, para terminar formándose un mar de luces.
Entre los convocantes de la protesta estaban Fridays for Future, la organización que protesta contra el cambio climático, así como otras más pequeñas, por ejemplo el Europa-Literaturkreis Kapfenberg. También otras instituciones, como la Ópera, la Schauspiel Haus y Next Liberty.
También los festivales Diagonale, Elevate, La Strada, Styriarte y el Steirischer Herbst, también particulares y artistas.
Contra la extrema derecha también han protestado organizaciones de mujeres y de jóvenes, así como grupos cristianos.
La alcaldesa de Graz, Elke Kahr, perteneciente al Partido Comunista (KPÖ) y que ha ganado esta semana un premio a su labor, también ha mandado un mensaje de apoyo.
Es poco probable que ni esta manifestación ni las otras convenzan a los cenutrios, pero sí que son importantes para que la gente decente se dé cuenta de que no está sola.
Amén.
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